J. V. Paños, Valencia

Más de diez mil claveles componen el tradicional tapiz floral que desde ayer se puede ver de nuevo en la fachada de la Basílica de la Virgen de los Desamparados. Así, los ciudadanos pudieron conocer por fin el aspecto de una colorida obra que este año está dedicado a una de las figuras valencianas históricas, el padre Jofré. Se cumplen 600 años desde que el religioso pronunciase el sermón que dio origen a la devoción por la Mare de Déu, así como la creación del primer hospital psiquiátrico del mundo en la ciudad de Valencia.

El tapiz, de once metros de altura y casi diez de ancho recuerda también el centenario de la Corte de Honor de la Virgen, que también tiene lugar este año.

El artista valenciano Miguel Galbis ha vuelto a trabajar como cada año en esta obra, que representa en su parte superior el cuadro "El padre Jofré defendiendo a un loco" de Joaquín Sorolla, y en la inferior a varias valencianas y valencianos con el traje tradicional, elaborando el manto de la Virgen con ofrendas florales.

Llegada a la Plaza de la Virgen

A partir de la tarde, la Plaza de la Virgen comenzó a llenarse como cada año de personas venidas de la capital y los pueblos cercanos para pasar la noche y el día de hoy en las celebraciones en honor de la Virgen de los Desamparados.

De este modo, las personas que acudieron ayer hasta este lugar pudieron participar en los diferentes actos programados como la Salve a la Virgen, que incluye los Gozos, cantadas en honor a la Mare de Déu, que se remontan en algunos casos hasta el siglo XV.

La víspera de la fiesta grande también programaba el concierto de la Banda Municipal y el castillo de fuegos artificiales a cargo de Turis. Para cerrar la noche, la dansà, actividad que se celebra desde 1975 que recuerda el acto folclórico valenciano más antiguo, y que incluye también el canto de Albaes.