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El delegado del Gobierno en la Comunitat, Ricardo Peralta, señaló ayer que "la futura subestación eléctrica que sustituirá a la de Patraix cumple con el requisito de no perjudicar la salud de los ciudadanos, ya que se encuentra junto a un cementerio". El nuevo equipamiento recibe el nombre de Nuevo Cauce.
Peralta realizó estas manifestaciones a preguntas de los periodistas en relación con la petición de los vecinos de Sant Isidre de que se cumpla con el compromiso de soterrar la subestación eléctrica.
La propuesta del futuro equipamiento facilitaría, para Peralta, "la máxima rapidez en la ejecución de esa infraestructura y un ahorro en los costes". Añadió que "el consistorio debe contribuir a que el suministro esté garantizado en las mejores condiciones porque cualquier fallo tendría graves consecuencias".
El representante del Gobierno explicó sobre las propuestas de las empresas que "se han hecho en términos respetuosos con los acuerdos del ayuntamiento por la voluntad de los vecinos de que las subestaciones nuevas no perjudicaran la salud de los ciudadanos" y recordó que quien tiene las "competencias y responsabilidades sobre la subestación prevista en terrenos que se iban a destinar a la ampliación del Cementerio General, junto a la V-30 y el nuevo cauce, es el consistorio".
Por su parte, el concejal de Urbanismo, Jorge Bellver, acusó al delegado del Gobierno de "mentir" respecto a la subestación de Nuevo Cauce, y le señaló como responsable de "enredar" con respecto a la nueva infraestructura eléctrica y de desautorizar el acuerdo plenario rubricado el año pasado. La federación vecinal también exige el soterramiento y respalda a los vecinos de Sant Isidre.
Desestiman las alegaciones vecinales
La Conselleria de Infraestructuras ha dado el visto bueno a la concesión de la autorización a Iberdrola para ampliar la subestación de Torrefiel-Poble Nou y ha desestimado las alegaciones de los vecinos por considerar que se deben seguir las consideraciones de la Unión Europea en relación con los campos electromagnéticos. Sobre la ubicación, recuerdan a los vecinos que se trata de una ampliación de una ya existente. Las obras consisten en aumentar la instalación para disponer de más potencia y los trabajos deberán realizarse durante los próximos seis meses aunque se deberá obtener previamente la autorización municipal para empezar los trabajos en el recinto.
