El portavoz del PSPV en el Ayuntamiento de Valencia, Joan Calabuig, es, junto al popular y ya retirado Leopoldo Ortiz, el único exeurodiputado valenciano que accedió a instancias del Parlamento Europeo al fondo de pensiones privado gestionado por una sicav en Luxemburgo. La revelación de la contratación de este producto financiero por 39 eurodiputados españoles provocó ayer la dimisión del número 1 de Izquierda Unida en las pasadas Elecciones Europeas, Willy Meyer. Calabuig consideró la decisión de Meyer como «una exageración» y explicó que «es el Parlamento Europeo el que te ofrece acceder a este plan de pensiones cuando llegas a la Cámara».

Calabuig, que fue eurodiputado entre 2004 y 2008, aseguró que el Europarlamento propuso este fondo de pensiones porque hasta 2009 no se creó el Estatuto del Diputado en el Parlamento Europeo. «Era un fondo voluntario y accedió quien quería. Yo aporté unos 600 euros al mes», explicó. El Europarlamento aportaba el otro tercio, unos 300 euros durante el tiempo que ejerció de cargo público en la UE.

El portavoz socialista justificó que tanto las Corts como el Congreso contratan planes de pensiones para sus diputados. «La única diferencia es que como la sede administrativa del Europarlamento está en Luxemburgo el fondo también lo está allí», apuntó, y añadió: «Yo nunca he contratado ni he visto una sicav (producto financiero que tiene una tributación del 1 %), era la mesa del Parlamento Europeo la que se encargó de decidir sobre el plan».

Calabuig defendió que «nunca ha recibido rentabilidad alguna del fondo de pensiones» y que lo rescatará cuando se jubile. «No se cuál será la legislación aplicable y se pagarán los impuestos correspondientes. No tenemos ni la seguridad de que quede nada», manifestó.

Hasta 39 eurodiputados españoles accedieron a este fondo de pensiones privado que el Europarlamento radicó en Luxemburgo, un país donde la tributación es bajísima. Tras el escándalo, en el que también se ha visto involucrado el ministro de Hacienda, Cristobal Montoro, el Parlamento Europeo aclaró que este sistema de pensiones complementario fue creado en 1994 ante la falta de un régimen común, ya que en aquella época los sueldos, cobertura y prestaciones sociales de los eurodiputados dependían del Estado.