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Entrevista

Ana Domínguez: "La juventud no puede ser la 'maría' de las asignaturas del ayuntamiento"

«La primera palabra que me viene a la mente al hablar de jóvenes es 'precariedad'», explica Domínguez

Ana Domínguez: "La juventud no puede ser la 'maría' de las asignaturas del ayuntamiento"

Al preguntarle cómo describiría la situación general de las y los jóvenes en la ciudad de València responde con un rotundo «precariedad». Ana Domínguez es presidenta del Consell de Joventut de València desde hace un mes, pero recuerda la inestabilidad en la que el consejo ha vivido los últimos años, sobre todo, dicen, con la era del PP, cuando no recibían ni un solo euro de subvención. Ahora lanza un manifiesto para que las políticas de juventud sean protagonistas en el nuevo gobierno.

P Se suele justificar la precariedad juvenil justamente porque son jóvenes, no tienen «cargas»...

R Se da por hecho, pero se pasa por alto que la juventud tiene unas necesidades específicas que deben ser atendidas. Yo creo que no somos un rango de edad más. Somos una generación que ha vivido durante muchos años desilusionada, porque a pesar de tener unos estudios y una formación, la sociedad no nos ha respondido como toca. Por eso la primera palabra que me viene a la cabeza para describir a la juventud es la precariedad. Pero, eso sí, con muchísima fuerza.

P Con esta situación, ¿se puede exigir un peso profesional a quien salta, y esto si tiene suerte, de un contrato de seis meses a otro?

R Yo creo que eso no se les puede exigir. Nadie nace aprendido, pero somos una generación muy potente y se nos está desaprovechando.

P ¿Se están abandonado las necesidades de los y las jóvenes en el plano político?

R En los últimos cuatro años se ha avanzado bastante, pero yo creo que para los políticos no somos el electorado predilecto. Nosotros, como consejo, estamos haciendo mucha fuerza por participar en los órganos del ayuntamiento.

P Igual que hay paridad de género, ¿no?

R Eso es. Igual que hay cuota para hombres y para mujeres, tiene que haber una cuota para gente joven. P Haga un balance de las políticas del ayuntamiento en cuanto a la juventud de estos últimos cuatro años. Primero con María Oliver y después con Berto Jaramillo.

R A ver, yo creo que de manera general, la juventud tiene que dejar de ser la asignatura «maría» del ayuntamiento. Tiene que ser una concejalía con la fuerza que toca. Si hay un concejal o una concejala de juventud debe estar peleándose continuamente con la concejalía de Vivienda y la de Empleo, porque son las áreas que nos afectan y preocupan. Están abandonando una generación que tiene 35 años y no puede emanciparse, que no puede tener hijos. Después sí creo que se han hecho políticas específicas para la juventud, como València Activa. Me gusta mucho el hecho de que no sean becas lo que se ofrece desde el ayuntamiento, sino contratos. También en el transporte público hay bastantes cositas por hacer.

P ¿Cuál es la directriz que darían al ayuntamiento en cuanto a la regularización del botellón?

R Eso lo hemos hablado mucho y muy ampliamente. Y la verdad es que no hemos llegado a un consenso. También podríamos hablar de otras formas de ocio alternativo que no pasen por el alcohol.

P En las pasadas paellas universitarias se criminalizó a los que fueron, llegándolos a calificar de manada descontrolada de ñus, ¿es una fama merecida?

R Claro que no. Creo que está bastante fuera de lugar.

P Durante el festival justificaban el botellón como un día para desfogarse después del estudio, ¿la ciudad da alternativas de ocio nocturno más allá de discotecas?

R Yo creo que otra de las formas en las que habría que avanzar es la cultural, pero es que tampoco tenemos dinero como para gastarlo en cultura. Otra de las peticiones que hemos hecho es facilitar el acceso de cultura a los jóvenes, en todas sus vertientes, porque ese festival también es cultura, estás escuchando artistas nacionales e internacionales. Esa también es una forma de consumir ocio y habría que fomentarlo. Por eso hemos propuesto la creación de un cheque cultural que acerque la cultura a los jóvenes.

P El Carnet Jove también da descuentos.

R Sí, pero es que no es suficiente. Si tu alquiler te come la mitad de tu sueldo o más, contando que trabajes... Esto también deprime a la gente joven y al final la alternativa más barata es el botellón. El cheque sería la forma de controlar ese ocio.

P ¿Pero cree que con tener un cheque cultural para ir al teatro, ya no harían botellón?

R Bueno, no es que no hicieran botellón, pero ya no tendrían solo un plan. Tampoco hay que criminalizar el consumo de alcohol, solo hay que fomentar otras formas alternativas de consumo.

P También existe un agujero negro en el tema de los menores migrantes solos que cumplen 18 años, ¿incluyeron este punto en el manifiesto?

R Pedíamos una Europa comprometida con las personas migrantes. También se le pediría al ayuntamiento que instara a la Generalitat para que regularizase la situación. O incluso viviendas sociales específicas para ellos u ofrecer empleos concretos para ellos para que puedan ganar en independencia y no tengan que verse en la calle. Al fin y al cabo les pasa lo mismo que a cualquier otro joven con nacionalidad valenciana. La ley dice que dejas de ser joven a los 31 años y muchos no pueden independizarse hasta esa edad. En este caso, aunque dejen de ser menores por la ley siguen estando desamparados, deberían seguir siendo acompañados en vivienda, empleo y formación.

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