La ciudad de València inició ayer su «metamorfosis» con la firma del convenio del canal de acceso que acabará con el «hachazo» ferroviario que ha dividido el sur de la ciudad durante 170 años. Es el tiempo que transcurrido desde que en 1852 se inaugura la línea València-Silla hasta completar en 1854 el trayecto a Xàtiva. Dos años antes, en 1852, se inauguró el primer trazado ferroviario de la Comunitat Valenciana entre València y el Grao.

Ciento setenta años después tres administraciones -el Ministerio de Transportes, la Generalitat y el Ayuntamiento de València- suscribieron ayer el convenio para financiar las obras del canal de acceso. El soterramiento de apenas un kilómetro de vías de Cercanías y alta velocidad entre el bulevar sur y el pasillo de vías de vías que separa los barrios de Malilla, Creu Coberta y Sant Marcel·lí.

El acto, bautizado como «València canvia Km 1», es un paso más hacia la operación Parque Central

Puede parecer poca cosa, por la escasa longitud de la actuación. Pero la inversión de 531,6 millones conveniada ayer permitirá soterrar las vías de Cercanías y de alta velocidad (la parte que aún salía a la superficie al llegar a la Creu Coberta). Se trata por tanto de la actuación más relevante desde que llegó el tren de alta velocidad a València el 18 de diciembre de 2010. El acto de ayer, bautizado como «València canvia kilómetro 1», es un paso más hacia la operación Parque Central a la que aún resta por finalizar la segunda tramitación administrativa de la futura Estación Central y el túnel pasante que soterrará completamente las vías de Cercanías y alta velocidad y que acabará con la condición de fondo de saco de la Estació del Nord. Aunque para estas últimas actuaciones aún quede una década, como mínimo, para que se materialicen.

Los parlamentos de los tres firmantes del convenio destacaron el hito histórico de esta actuación. El alcalde de València Joan Ribó aseguró que el de ayer «es uno de esos días en los que uno está más satisfecho de ser alcalde de València, porque el convenio supone la licitación de las obras del canal de acceso que supondrán una inversión de más de 500 millones, la obra más importante desde el Plan Sur de los años 70 del siglo pasado».

Bulevar Federico García Lorca

Las obras cofinanciadas entre las tres administraciones, «permitirán eliminar el muro que separa la ciudad desde hace 170 años y la apertura del bulevar Federico García Lorca, además de la supresión del puente del 'Scalextric'». Según Ribó el canal de acceso «es un hito fundamental para el corredor mediterráneo y el final del cuello de botella de la Estación del Norte, que pasará a ser pasante. Porque València ha sido una rara avis en las ciudades europeas, con una estación terminal en pleno siglo XXI. Es una paso fundamental de una actuación que esperamos desde junio de 2003, cuando se firmó el antecedente de este convenio».

Ribó no olvidó el tono reivindicativo. «Pedimos celeridad en la tramitación de los proyectos pendientes de la estación central, el túnel pasante y la doble plataforma a Castelló. València no se puede permitir perder ningún nuevo tren, ha perdido demasiados en la historia reciente». 

La ministra garantiza los 3.200 millones que precisa la red arterial ferroviaria de València para ejecutarse

La ministra de Transportes Raquel Sánchez defendió que la firma del convenio «supone iniciar las obras de metaformosis de València y un impulso a las obras del corredor mediterráneo, que lleva esperando mucho tiempo, desde 2003».

Según Raquel Sánchez «València está preparada para el futuro que pasa por el desarrollo e impulso del corredor mediterráneo, una apuesta inequívoca de este Gobierno: hemos aumentado la longitud en más de 233 kilómetros y los estudios que se redactan y trabajan». También recordó que «en 2022 hay consignados 1.400 millones de inversión, de los que uno de cada cuatro se destinan a la Comunitat Valenciana. Las cifras de licitación desde 2018 suman 3.600 millones de euros: una licitación a la semana en el corredor mediterráneo, un ritmo sin precedentes», destacó.

Inversiones garantizadas

«Seguimos avanzando y no vamos a parar en impulsar el corredor con la vista puesta en 2026, como nos comprometimos». La ministra también recordó sobre los estudios informativos del canal de acceso y la doble plataforma que siguen analizando las alegaciones presentadas. Una actuación global que supondrá «una inversión de 3.200 millones para València en los próximos años».

Por último, el presidente de la Generalitat Ximo Puig recordó que "hace siglo y medio València derribó su muralla. Hoy no lo haríamos. Pero ahora comenzamos a derribar la muralla de las vías, la frontera que separa los barrios del sur, por una altura de 17 centímetros, la de los raíles". Puig ha recordado que València planifica desde 1958 una solución ferroviaria para València, pero "la única playa de vías en Malilla era la de las vías". Una imagen que comenzará a desaparecer con la licitación inmminente de las obras del canal de acceso, "que da respuestas a desafíos en mapas superpuestos: cohesionará barrios separados y modificará la trama urbana del sur. Es el inicio de la gran transformación de la red arterial ferroviaria de València, porque es inaplazable acabar con el 'cul de sac' ferroviario, que incopora la visión metropolitana con una nueva movilidad para las Cercanías, como un elemento de vida para miles de ciudadanos", ha asegurado. Además de ser una inversión europea gracias a los fondos del mecanismo de recuperación y resiliencia que recibirá la inversión del canal de acceso". Por lo que ha destacado que a partir del convenio suscrito hoy "València empieza a saltar hoy esa barrera de 17 centímetros".

Joaquín Sorolla: de 3,8 millones de viajeros a 8,7

Las obras del canal de acceso incluyen la ampliación de la estación de alta velocidad de Joaquón Sorolla, ideada como estación provisional pero que va para largo. La ministra de Transportes Raquel Sánchez recordó que la ampliación de la terminal de Joaquín Sorolla se ha planificado para albergar el incremento de usuarios previsto tras la liberalización del transporte de pasajeros en alta velocidad. A partir del próximo otoño Renfe competirá con los operadores privados Iryo y Ouigo en el trayecto del AVE València-Madrid. Actualmente «3,8 millones de viajeros usan la Joaquín Sorolla y la previsión es superar los 8,7 millones en cinco años. Creemos que la liberalización será un éxito para el sector ferroviario y para València. Son hitos que hay que saber aprovechar», defendió la ministra de Transportes. L. B. València

La fase tres del futuro canal de acceso prevé el soterramiento de todas las vías de acceso a las estaciones de València Nord y Joaquín Sorolla, que que incluirá la prolongación de los túneles del nudo sur por donde entran actualmente a València los trenes de alta velocidad. La actuación también incluye la remodelación de la estación Joaquín Sorolla para adaptarse al nuevo esquema de vías del futuro canal de acceso soterrado, pero también para incrementar su capacidad ante la entrada en servicio de operadores privados en la línea de alta velocidad entre València y Madrid a partir de este otoño. También ante el previsible incremento de usuarios cuando finalicen las obras de mejora en el corredor mediterráneo, para implantar el ancho europeo entre València y Tarragona.

El coste estimado de la actuación global del canal de acceso fase tres será de 531.689.000 € financiado entre las tres administraciones, según lo acordado en el convenio suscrito el 26 de febrero de 2003 y ratificado ahora Adif Alta Velocidad abonará el 50 % (265.845.000 €) y la otra mitad se distribuirá entre el 25% de la Generalitat (132.922.000 €) y el 25% el Ayuntamiento de València (132.922.000 €). A esta cantidad habría que sumar el coste estimado de 18,2 millones de euros de la remodelación de la Estación Joaquín Sorolla, que además de habilitar nuevos andenes incluirá un nuevo vestíbulo elevado y la ampliación del aparcamiento adyacente. La financiación de esta última actuación la asumirá en solitario Adif-Alta Velocidad. 

La obra de ingeniería del canal de acceso tendrá un triple reto: compaginar la ejecución con el tráfico ferroviario diario, garantizar el acceso en superficie a todos los trenes a las estaciones de Joaquín Sorolla y del Norte y, mediante los mínimos cambios, servir para el acceso soterrado cuando se complete la actuación ferroviaria-urbanística con la Estación Central y el túnel pasante. El plazo de ejecución será de 51 meses. La previsión de Adif es que el túnel de Giorgeta no se derribe hasta un año antes de finalizar las obras, alrededor de 2026, para facilitar los trabajos, que también incluirán el desvío del colector sur. El Ayuntamiento de València ya ha comenzado a rediseñar el espacio urbano que liberará la desaparición de las vías para crear un bulevar Federico García Lorca «más verde y con menos viales», según adelantó en su momento el concejal de Movilidad de València, Giuseppe Grezzi.

Una actuación que coserá los barrios y dudas sobre el inicio de la ejecución

Una de cal y una de arena en las reacciones al convenio del canal de acceso. La vicealcaldesa de València y secretaria general de los socialistas en la ciudad, Sandra Gómez, defendió el hito histórico para València que supone la firma del convenio del canal de acceso ferroviario y la licitación de las obras». Una operación que «va a permitir coser los barrios del sur de la ciudad de València y posicionar a València como la capital y el nudo logístico del futuro corredor mediterráneo y, por lo tanto, acercarnos más a Europa», destacó la vicealcaldesa tras asistir a la firma del convenio.

Por el contrario, la portavoz del Partido Popular en el Ayuntamiento de Valencia, María José Catalá, mostró su preocupación sobre el convenio del canal de acceso suscrito ayer porque «la ministra no ha dado ni una fecha del inicio de obras». A pesar de que «este convenio llega con años de retraso y con la incertidumbre de una posible impugnación por cláusulas que ha puesto Adif y que los contratistas consideran abusivas. Nos tememos nuevos retrasos porque hoy no hemos oído ni una fecha de inicio de obra».

Sin embargo, para Sandra Gómez «gracias a la apuesta del Gobierno de Pedro Sánchez por la Comunitat Valenciana y especialmente por la ciudad de València se va a resolver una de las deudas históricas que la ciudad arrastra desde hace casi dos siglos» y «se avanza en cuestiones como la condonación de la deuda de la Marina, el apoyo a Ford para que se posicione en la Comunitat Valenciana o con la gigafactoría de Volkswagen».

Por último, Catalá también echó en falta que en los parlamentos se mencionara el soterramiento de las vías de Serrería entre los barrios del Grao y Penyarroja. «Me preocupa la actitud pasiva, amilanada y avergonzada de Compromís y PSOE que renuncian al soterramiento de las vías para acabar con este muro ferroviario. En febrero debía de estar el estudio informativa y a día de hoy no sabemos nada», criticó.