Las nuevas zonas verdes y naranja de Russafa, pensadas para residentes, han comenzado con algunos desajustes entre las plazas reservadas y la ocupación de las mismas. A primera hora de la mañana se han visto algunas calles con menos coches de los habituales al tratarse de plazas que no permiten la rotación. Según datos del PP, en Russafa se han pintado 1.377 plazas para residentes (334 verdes y 1.034 naranjas), pero sólo se han concedido 326 autorizaciones, previó pago de 86,20 euros al año y 7,18 euros al mes. Además, ha habido multitud de quejas de los negocios de la zona porque entienden que la medida les va a perjudicar.

El PP ha vuelto a pedir al Gobierno de Ribó y PSOE que realice una campaña informativa seria de las nuevas zonas verdes de aparcamiento, pues desde hoy entran en funcionamiento en el barrio de Russafa y ya se han convertido en una nueva restricción del gobierno municipal como ya hicieron con el Área Preferencial Residencial de Ciutat Vella.

“Es evidente que no está todo listo es una nueva improvisación para esta nueva restricción que de momento va suponer para los no empadronados en el barrio, los que no tengan autorización previó pago de una tasa anual o mensual, que les cueste más dinero por aparcar, antes podían hacerlo en zona azul o en libres  gratuitamente, pero ahora tendrán que pagar por estacionar en el barrio. La realidad es que ayer habían muchas zonas verdes libres y sin vehículos estacionados”, explica Mundina. 

Mundina ha explicado que desde hoy entra en funcionamiento la nueva zona verde residencial de Ruzafa sin una campaña informativa y el desconocimiento de muchos vecinos del barrio así como comerciantes y hosteleros. “Esperemos que no sea otra actuación para freir a multas a los vecinos como ha ocurrido en Ciutat Vella, donde en 9 meses se han puesto 107.000 multas con las que el gobierno de Ribó y PSOE ha hecho caja, más de 1,2 millones de euros”, explica Mundina.

Menos aparcamiento

València ha perdido cerca de 11.500 plazas de aparcamiento libre en los últimos 7 años, lo que supone un 17% menos que en 2015. El dato, correspondiente a diciembre de 2021, afecta tanto a las plazas de estacionamiento libre en superficie, en las calles y plazas, como a las de zona ORA, previo pago, sea en azul o en naranja.  Las políticas para cambiar la movilidad en la capital valenciana, mediante la transformación de los espacios urbanos en nuevas zonas peatonales, además del nuevo sistema de estacionamiento de la ORA, ha provocado una reducción de plazas libres, que ahora son de pago, bien, azules, o bien naranjas, y ahora verdes.

El concejal del PP, Carlos Mundina, ha asegurado que “para la único que han servido las cámaras de Ciutat Vella es para que el alcalde Ribó y sus socios del PSOE hayan seguido haciendo caja a costa de los vecinos de la ciudad. Es lo mismo que ha ocurrido al prolongar la ORA al mediodía, de 14 a 16 horas, y una hora más por la noche hasta las 21 horas”.

Mundina ha asegurado que “tampoco ha existido ni consenso con comerciantes de la zona ni con vecinos y mucho menos con las comisiones falleras del barrio, donde acuden habitualmente 7.000 falleros y falleras. Lo pidieron en el pleno, pero el rodillo del Gobierno de Compromís y PSOE decidió seguir adelante y la consecuencia es en 9 meses de implantación de la APR en Ciutat Vella han sido más de 107.000 multas y una recaudación de 1,2 millones de euros. El Gobierno de Ribó ha hecho caja a costa de los vecinos”.