Los migrantes que malviven en la antigua fábrica de Benimaclet han sido convocados para una reunión en los próximos días en los que se les va a informar del plan para tapiar esta instalación en ruinas y para realojarlos en un albergue municipal. El departamento de Servicios Sociales del Ayuntamiento de València, que dirige la concejala Isabel Lozano, va a informar en ese encuentro a al menos una decenas de emigrantes que han confirmado que acudirán al Centro Municipal de Servicios Sociales donde se les tratará de disuadir de la conveniencia "para su seguridad personal" de abandonar el edificio y de que acepten trasladarse al espacio que habilitará el ayuntamiento para ellos.
Fuentes municipales confirman que será un albergue con horarios adaptados a este grupo de personas, unos 27 emigrantes de Ghana y de otros países africanos, que en gran parte son temporeros que trabajan en la naranja y que necesitan tener libertad de movimientos para salir por la mañana a su lugar de trabajo y regresar ya en la tarde-noche. En este recurso se les ofrecerá alojamiento para dormir además de una ducha y comida. Lo mismo ocurre con los otros migrantes alojados en La Garrofera, que trabajan como aparca-coches y chatarreros, que precisan cierta libertad horaria para salir a ganarse la vida.
En la reunión que han convocado los técnicos municipales está previsto que estén también representantes de la Asociación de Vecinos de Benimaclet, trabajadores de Servicios Sociales y la coordinadora del servicio, miembros de las organizaciones africanas que trabajan con estas personas cada día, el equipo de Alana que los asiste habitualmente y los propios migrantes, que han sido invitados.
La idea de los técnicos que están actuando en este caso es tratar de concienciarlos para que dejen la fábrica, que por otra parte, será tapiada en breve y se estudiará si se procede a derribarla. Dentro de este plan humanitario, está previsto incluso que se pueda llevar a un grupo de afectados por el desalojo a visitar el albergue municipal donde los van a alojar para que lo vean y puedan hacerse una idea de los servicios y horarios que van a tener allí.
