Catalá preside la festividad de San Vicente y afea a Ribó sus ocho años de ausencia

La alcaldesa confirma que habrá conversaciones para trasladar la fiesta a fin de semana

El buen tiempo acompaña a los actos que se desarrollan en el centro de la ciudad con gran asistencia de público

Moisés Domínguez

Moisés Domínguez

La festividad de San Vicente Mártir ha empezado con la celebración de la Misa mayor en la catedral, oficiada por el arzobispo Enrique Benavent. La meteorología acompaña a la jornada, que continuó con una procesión general para la que el público espera desde bastante tiempo antes de la finalización del oficio religioso. Se trata de la llamada "Procesión Estacional", en la que se visitan los lugares del martirio del patrón de la ciudad.

Con el cambio de gobierno municipal se materializa el regreso a los oficios religiosos por parte de la primera autoridad municipal. Así, tal como ocurrió en el Te Deum del 9 d'Octubre, la banda roja en la indumentaria de María José Catalá anunciaba la presencia de la alcaldía después de ocho años. En un oficio que fue prácticamente una junta de gobierno porque la totalidad del equipo municipal estuvo presente, a excepción por diferentes causas, de Rocío Gil y Juanma Badenas, así como Nuria Llopis por parte del PSOE. También estuvo presente el ex presidente de la Generalitat, Francisco Camps, un habitual en esta misa, pero que ahora fue incorporado a la primera línea en la procesión general.

Procesión de San Vicente Mártir en València

Germán Caballero

A lo largo del año se seguirán produciendo misas en las que contarán con la titular del gobierno de la ciudad. Catalá apelaba a un discurso que ya decía cuando estaba en la oposición, cuando afeaba a Joan Ribó su ausencia en este tipo de eventos -que el anterior alcalde justificaba en la aconfesionalidad de las instituciones-. "Es el primer patrono de la ciudad y es un orgullo para mi asistir como alcaldesa. Siempre dije en los años anteriores que, por una señal de respeto tanto al hecho de ser el patrón como por las entidades que trabajan, había que asistir. Y asisto convencida de que debemos proteger, por encima de las ideas y convicciones, porque representamos a todos, a las entidades que trabajan por la cultura valenciana".

El "bateig de Sant Vicent" también sale a la calle

Germán Caballero

"Veremos el calendario"

Sobre la festividad y las fechas, la ecuación está clara: si es en fin de semana o en puente, la asistencia se multiplica. Si es entre semana, baja enteros. Este lunes, la combinación de puente y buen tiempo acompañaba a la presencia de público. No se puede comparar con otras grandes fiestas como el Corpus -ni siquiera San Vicente coincide con visita masiva de turista- pero, siendo seguramente el menos conocido de los festivos de la ciudad, y con menos capacidad de arrastre, la talla del mártir no desfiló para nada sola. Incluso a pesar de las otras dos grandes ofertas: salir de la ciudad durante tres días o, quedándose, acudir a puerto o playa. Catalá vino a dejar claro lo asegurado esta semana: que con consenso se puede modificar y trasladar a domingo. "Veremos el calendario cómo lo ajustamos, a ver si podemos, junto con el Arzobispado y las entidades, lograr lo mejor". En esta ocasión, el calendario ayudaba: "creo que para todos los valencianos este año han sido tres días largos también". El próximo año, al haber un febrero bisiesto, la fiesta se marcha a mitad de la semana, el miércoles.

Y un "bateig" en San Esteban

Casi simultáneamente -porque la misa se alargó más de lo previsto- desde el Pouet de Sant Vicent salía el "bateig", la representación del bautizo de San Vicente Ferrer -llamado así por nacer coincidiendo en fechas con el día de San Vicente Mártir- y en la que el Altar de la Pila Bautismal recrea el hecho con toda la realidad, puesto que en la iglesia de San Esteban, y en la misma pila que el hijo de Vicente Ferrer. En esta ocasión, el pequeño Cayetano Vicente Carceller Almela, que recorrió las calles del centro en carroza acompañado de los padrinos, Irene Manglano y Gonzalo Peinado. Es el segundo bebé que es hijo del cocinero "Masterchef" Toni Carceller, que en 2022 ya bautizó de la misma forma a Gonzalo Vicente.

También estuvo presente la familia Roig, pues el altar principal del Pouet ha contado para su restauración con el mecenazgo de Hortensia Herrero.

Mascletà en honor a San Vicente Mártir

Moisés Domínguez

Sastres y Modistas y pirotecnia

Dentro de la peculiaridad de la fiesta, mientras el "bateig" llegaba a San Esteban y la general finalizaba su recorrido, por la plaza de la Reina aparecía, por un lateral, el cortejo del Gremio de Sastres y Modistas con su senyera para honrar su fiesta mayor. Y coincidía exactamente en el tiempo con la "mascletà" conmemorativa. Un bombardeo exclusivamente aéreo de dos minutos y medio que sirvió para trazar imágenes muy plásticas, con el Micalet detrás.

Una vez celebrada la fiesta del primer patrón, la atención festiva va virando hacia las Fallas, que se encargarán de copar casi todo el calendario. Falta Sant Blai en Russafa, que adquiere un sabor especial con el segundo "porrat" -promovido por una falla, Doctor Serrano- en el primer fin de semana de febrero, y los festejos de Carnaval. Pero a partir de ahora, la falla y la peineta mandan.