Instituciones y comerciantes claman contra la campaña "Los mercados se mueren"

La campaña impulsada por la ONG Justicia Alimentaria con el apoyo de los Ministerios de Asuntos Exteriores y de Consumo ha provocado un rechazo unánime de las instituciones valencianas y de las organizaciones agrarias y del comercio valenciano, un clamor contrario a la campaña titulada "Los mercados se mueren", que pretende concienciar a los ciudadanos sobre la necesidad de comprar en los mercados municipales y de apostar por los productos de proximidad en la alimentación diaria y en las viandas de la cesta de la compra.

Sin embargo, el mensaje directo de la campaña, que ya se ha visto en los mupis de algunas ciudades españolas como València, el propio cartel principal y las fotos de las frutas podridas para agitar las conciencias no ha gustado nada. Por ejemplo, el president del Consell Carlos Mazón, la consellera Nuria Montes y la alcaldesa de València María José Catalá han reclamado la inmediata retirada de la campaña.

El concejal de comercio y mercados Santi Ballester de València ha hecho lo propio. Confemercats, las Cámaras de Comercio de la Comunitat Valenciana, Ava-Asaja y la Confederación de Mercados Tradicionales y de Abastos de España han reclamado la retirada inmediata de esta campaña por entender que perjudica la imagen del propio comercio local y por el mal uso que se hace de los cítricos. En cambio Justicia Alimentaria ha defendido su iniciativa y ha rechazado las críticas, achacándolas "a la censura del PP valenciano".

El president Mazón ha exigido que se retire esta campaña "por la falta de sensibilidad, por el mal gusto" que representa, en particular, también, "porque se han usado cítricos podridos" para ilustrarla. "Siempre una naranja, un limón pudriéndose... siempre algo de mi tierra, por favor quiten esta campaña, lo pido por favor", reclamó. En esa línea, la consellera de Innovación, Industria, Comercio y Turismo y la directora general de Comercio, Artesanía y Consumo han remitido una carta dirigida a los ministerios de Asuntos Exteriores y de Derechos Sociales y Consumo exigiendo que retiren su apoyo a la campaña lanzada por la ONGD Justicia Alimentaria con el lema “Los mercados se mueren”. Nuria Montes califica de “absolutamente inadmisible que el Gobierno central permita esta campaña de desprestigio y agresión injustificable hacia nuestros mercados municipales y nuestros productos”.

El síndic del PP en Les Corts Miguel Barrachina ha reclamado también la retirada de esta iniciativa de la organización ecologista Justicia Alimentaria financiada por el Gobierno con la imagen de una naranja podrida, al considerar que supone menospreciar un "icono" de la agricultura valenciana.

La campaña, con el lema 'Los mercados se mueren', se ha difundido por varias ciudades de España con varias imágenes de alimentos podridos. "Pretende instar a la transformación de los mercados municipales para garantizar el acceso a una alimentación saludable, local y con un precio justo", explica esta entidad ecologista en su web.

Para el síndic 'popular', se daña la imagen de la Comunitat, Valenciana al utilizar una naranja podrida cuando esta fruta es "un verdadero icono" de la agricultura y la economía valenciana.

Por eso ha exigido al Gobierno que "retire esta penosa campaña", en declaraciones en los pasillos de Les Corts antes del inicio del pleno de este miércoles.

La alcaldesa de Valencia María José Catalá ha calificado de "inadecuada e intolerable" esta iniciativa de Justicia Alimentaria apoyada por los dos ministerios citados porque “nuestro mercados municipales y de abastos son un motor económico a potenciar y no a denigrar” y ha instado al Gobierno a paralizar la campaña y retirarla de las ciudades en las que esté instalada, como ha hecho Mercados Tradicionales de Abastos de España.

En este sentido, la alcaldesa ha añadido que además “la imagen elegida para la campaña, una naranja podrida, es totalmente desafortunada porque ataca a un sector, el citrícola que lo que necesita es su potenciación, no mostrar su producto en las peores condiciones”.

Asimismo ha apuntado que las instituciones públicas "deben de velar para dar visibilidad a un área no se ataque a otras, que es precisamente lo que ha sucedido en esta ocasión sino más bien al contrario, atacar el trabajo de mercados, mercados de abastos y agricultores, que trabajan duro a diario. Esta es una campaña que no favorece precisamente el consumo de sus productos”.