Toda la bancada del PP abandonó ayer el pleno municipal de Riba-roja de Túria justo cuando se votaba el primer punto del orden del día: la liberación del concejal de Fomento Económico y Comercio, Ocupación y Agricultura, y Actividades, Rafa Folgado, de Compromís. El desencadenante se encuentra en las declaraciones del alcalde, Robert Raga, que la portavoz popular, María José Ruiz, definió como «descalificaciones e insultos».

Durante el debate de este punto, Ruiz definió la liberación de Rafa Folgado como una «compra de fidelidades» en un «gobierno inestable», y recordó que ya son siete los concejales liberados en la corporación local (seis concejales del PSPV y uno de EU).

Esto soliviantó a Raga, que inició su turno diciendo que Ruiz «no tiene empacho ni vergüenza, ni la conoce». «Una portavoz que fue fichada por el PP ya siendo liberada (...) que no ha conocido lo que es trabajar que no sea en esta casa. Bueno, trabajar, venir», prosiguió. Raga aseguró que Ruiz no ha mostrado la declaración de renta, acusó a su partido de «ir de compras no transparentes y que les llevan a la cárcel» y sacó a la luz un episodio en el que entraron en casa de la edila popular a robar en su «caja famosa». Tras ello, Ruiz pidió la palabra por alusiones, que no le fue concedida, y su micrófono fue cortado, por lo que abandonó el pleno junto a sus compañeros de formación.

La liberación de Rafa Folgado fue aprobada con los votos a favor de PSPV, Compromís, EU y Ciudadanos, y la oposición de Riba-roja Pot.