Acció Cultural del País Valencià (ACPV) indicó ayer a la Unión Europea y, en concreto, a la comisaria europea de la Sociedad de la Información y Medios que la no interferencia en los asuntos internos de los Estados "no puede justificar la pasividad ante los ataques a la libertad de expresión, la pluralidad informativa y una lengua cooficial con millones de hablantes". La entidad realizó estas declaraciones en respuesta a la resolución de la Comisión Europea, que estima que el cierre de los repetidores de TV3 no vulnera el derecho comunitario. Explica que se pronuncia de este modo ante la contestación de la comisaria europea de Sociedad de la Información y Medios, Viviane Reding, al eurodiputado Ramon Tremosa, "que denunciaba el intento del actual Gobierno valenciano de cerrar las emisiones de TV3" en la Comunitat Valenciana.

Acció Cultural considera que "el principio de no interferencia en los asuntos de los estados que rige el funcionamiento de la Unión Europea no puede justificar en ningún caso la pasividad de las instituciones europeas ante los ataques a la libertad de expresión, la pluralidad informativa y una lengua cooficial con más de 9 millones de hablantes". En esta sentido, ACPV señaló que "la Unión Europea es una unión de Estados que no reconoce suficientemente la existencia de realidades lingüísticas y culturales diferentes de las estatales, incluso cuando esto significa políticas discriminatorias respeto a estas realidades", precisó.