Albert Permanyer, profesor titular del departamento de Petrología y Geoquímica de la Universitat de Barcelona, manifestó ayer que el potencial petrolífero de la plataforma marina situada al sur de las Columbretes es "muy importante" y aseguró que entre las razones por las que todavía no se ha encontrado un gran yacimiento de petróleo se encuentra la de que "se ha perforado e investigado poco".

"Existe un alto riesgo siempre de no acertar donde se perfora y las compañías, que son privadas y se deben a sus accionistas, se lo piensan mucho antes de gastar millones de dolares en una investigación", añadió .

Albert Permanyer ha investigado algunas de las más importantes cuencas petrolíferas descubiertas en los últimos años en el mundo. En 2002 publico un artículo científico que situaba en una formación geológica del Maestrazgo el origen del petróleo hallado en el campo "Amposta", frente a Vinaròs, reconvertido en el almacén subterráneo de gas de Escal UGS.

Permanyer y su equipo demostraron que la roca "madre" de la que provenía este petróleo era la formación "Ascla", que toma su nombre del afloramiento en superficie existente en el Mas d' Ascla, en el Maestrazgo.

"Ascla" tiene su origen en el Jurásico, cuando el Maestrazgo era un mar abierto en cuyo fondo se depositaban toneladas y toneladas de restos orgánicos. Hace 90 millones de años ya en el Cretácico (Turoniense superior) la formación quedó enterrada a profundidades de entre 3 y 3,7 kilómetros. La presión y el calor hicieron que el depósito entrara en lo que los expertos llaman "la ventana del petróleo". Más tarde, la erosión dejó al descubierto restos de esta formación cerca de Alcalá de Xivert.

Permanyer confirmó con sus investigaciones que "Ascla" era una buena roca "madre" y cree- "es una intuición porque no es posible saber nada de lo que ocurre en la plataforma marina"- que es lo que ahora buscan las compañías petrolíferas.

El investigador no espera "grandes descubrimientos" en torno al campo de "Casablanca", donde Repsol acaba de de perforar dos nuevos pozos, aunque sí al sur de las Columbretes y en el Golfo de Valencia, donde existen posibilidades de realizar "importantes descubrimientos".

En su opinión, las compañías que han solicitado investigar al sur de las islas, entre ellas la británica Cairn, "están analizando toda la sísmica existente y reinterpretándola, buscando delimitar toda la formación ýAsclaý para investigar después dónde ha podido quedar atrapado el petróleo que ha generado la formación".

No es fácil sin embargo dar con la esquiva "Ascla", que solo ha aparecido en superficie y en el sondeo "Maestrazgo-1", en Càlig, aunque las nuevas tecnologías en sísmica 3-D hacen más fácil este seguimiento.

Permanyer relata una anécdota que describe la forma de trabajar de las petroleras. "En 2003 se celebró un importante congreso de geólogos americanos del petróleo en Barcelona. Por los pasillos me encontré al representante de una compañía que ofrecía datos reprocesados de líneas sísmicas sobre "Ascla" y citaba mi artículo. De ese modo me enteré que hacía 10 días que lo habían publicado en una revista especializada".

"Vergonzoso"

Albert Permanyer, que se encuentra en Madrid impartiendo un Master en la Universidad Complutense, no esconde sus críticas hacia los políticos que se oponen a la exploración petrolífera. Reunir a 7 consellers y otros tantos altos cargos en una comisión contra las prospecciones es, en su opinión, "una barbaridad", además de "una tontería".

"Aquí- en Cataluña- ocurrió algo parecido cuando una compañía decidió arriesgar su dinero para buscar petróleo en el Pirineo. Tardaron dos o tres años en darles el permiso, por pura incompetencia, por no saber de que va esto. Paisajísticamente no se tocó ni la brizna de un árbol. No hubo ningún tipo de impacto. En Valencia pasa lo mismo y me parece vergonzoso. Sencillamente es una muestra de falta de capacidad de los políticos para estar a la altura de las circunstancias".

En su opinión, llegado el momento de perforar, la aparición de vertidos en tierra es "prácticamente imposible" y "muy difícil" en el mar. Atribuye lo ocurrido en la plataforma de BP en el Caribe a una "negligencia" por no invertir en seguridad y califica de "menores", al tiempo que los rechaza, los vertidos detectados en la plataforma "Casablanca", en el Delta del Ebro.

"Estamos pagando cada litro de combustible que necesita la economía española y desde ayer creo que lo hacemos ya a 100 dólares el barril, pero nos permitimos el lujo de decirle no a una compañía privada que arriesga su dinero para buscar lo que nosotros necesitamos", concluyó.