Desde hace dos años, el juez que instruye el caso Ivex-Julio Iglesias tiene la asignatura pendiente de llamar a declarar al cantante, en cumplimiento de una orden de la Audiencia de Valencia. Pero el artista no lleva dos años huyendo de la justicia. Lo explicó a, través de su portavoz, a Levante-EMV: «Julio Iglesias no tiene nada que ocultar y así lo quiere transmitir», comentó. Y añadió: «De lo contrario no actuaría en el Palau de les Arts de Valencia», auditorio que está localizado, además, justo enfrente de la Ciudad de la Justicia, que alberga, entre otros, el juzgado de instrucción número 19.

El artista contratado por la Generalitat de Eduardo Zaplana para promocionar los productos valencianos en el mundo a cambio de seis millones de euros libres de impuestos —según el contrato «b» revelado por este diario y escondido a las Corts, la opinión pública y a la Agencia Tributaria— quiso aclarar que en todo este proceso judicial no ha recibido ninguna citación para declarar como testigo.

Si la recibiera, consultaría con sus abogados y tomaría la decisión que le recomendaran, pero desde la posición de que no tiene nada que esconder, insistió el citado portavoz. Subrayó, además, que sus casas están radicadas en Ojén, Miami y Punta Cana y las direcciones son conocidas «hasta por las revistas». De hecho, como ya informó este diario, en el juzgado constan los tres domicilios del cantante, además de la dirección de la oficina de representación artística situada en Miami. El representante de Julio Iglesias, Luis Fernando Esteban, remitió al juez la dirección suya para que le enviara la citación y también las direcciones de las del artista al que presta sus servicios profesionales. El responsable de seguridad de la casa malagueña del cantante confirmó a la policía la calle y el número del domicilio y, de paso, informó de que regularmente el artista pasa temporadas en esa residencia.

El titular del juzgado de instrucción 19 optó por enviar una comisión rogatoria a Punta Cana (República Dominicana) para que se produzca allí la testifical. Sin embargo, la acusación popular en esta causa, ejercida por el PSPV, solicitó al juez que aproveche la presencia del cantante en Valencia para entregarle la citación y tomarle declaración en los días posteriores al concierto. El letrado Virgilio Latorre pidió al juzgado que sea «diligente» y aproveche para «localizar al testigo, incluso el día de su intervención en el concierto». Además, subrayó, es más barato que la declaración se produzca en Valencia que en el Caribe.