El día después es intenso. El consejo rector de la nueva Radiotelevisió Valenciana (RTVV) propuso la noche del jueves a Empar Marco (delegada de TV3 en el territorio valenciano) como primera directora general de una sociedad que aún no existe. Poco más de doce horas después, la periodista y filóloga atiende a Levante-EMV, mientras pospone una explicación más profunda sobre sus objetivos hasta que sea ratificada por la comisión de las Corts.

Habla de ilusión y responsabilidad. De entusiasmo. De que «la gente tiene muchas ganas de que empiece un medio de comunicación público valenciano». De la importancia de confeccionar un buen equipo, en el que lleva pensando «hace tiempo», pero no tiene hecho.

Es especialmente importante, dice, porque, «he tirado los muros. Mi proyecto no tiene director de televisión ni de radio. Es un organigrama muy basado en los contenidos: una plataforma de elaboración de materiales para las diferentes ventanas que hemos de abrir». Se trata de una televisión, dos radios y una web.

El equipo directivo se concentrará así en un jefe de programas o de contenidos, uno de informativos, uno de web y otro de técnicos. «Y luego ya una redacción única».

En programas contempla poca producción propia y «mucha externalización». «Quien lleve contenidos ha de conocer muy bien el sector audiovisual valenciano y ha de saber cómo encargar contenidos para una plataforma multimedia, con narraciones transmedia», apostilla.

Su proyecto, el mejor valorado por los nueve miembros del consejo rector de RTVV, prevé iniciar «una programación básica» en alguno de los medios de comunicación de la sociedad en «un plazo no superior a seis meses». Si entra en marzo en la octava planta del edificio de Burjassot, significa que debería haber emisiones estables en septiembre.

Las fechas tienen su importancia, porque antes deberá acometer el proceso de contratación de empleados, sobre el que sobrevuela la cuestión de los extrabajadores del desaparecido Canal 9.

La coautora de Vertigen no oculta su proximidad con el colectivo (ella misma fue en el pasado lingüista de la televisión y redactora de la radio), en el que conserva «amigos íntimos». «Tengo claro que tenemos que cumplir la ley de la corporació y el punto 6 del ERE mientras esté vigente», asevera. Este dice que, en el caso de una reapertura de la televisión pública, los ex tendrán prioridad en la contratación hasta el 30 de junio de este año.

La fecha puede ser clave en el camino hacia la conexión del nuevo medio de comunicación público. «La relación con los extrabajadores va a ser supercorrecta», sentencia Marco.

La periodista, que ha sido delegada de Avui y La Vanguardia antes de ser el rostro de TV3 en la Comunitat Valenciana, es consciente de que la etiqueta de proceder de la televisión catalana va a ser subrayada por algunos.

«Sé dónde estoy, en esta comunidad sabemos cuál es el monotema, pero me parece un absurdo. Tengo muy claro que siempre he trabajado haciendo noticias de Valencia y el medio -anuncia- ha de estar muy valencianizado».

«Hablamos de una plataforma valenciana y vamos a escuchar valenciano, porque es lo que he hecho siempre», asegura.

La educación y el público infantil son otros pilares del proyecto de Marco (prevé un club ligado a la comunidad escolar). También propone un compromiso contra la telebasura del sector audiovisual.