El PSPV traslada el apoyo de Ferraz a València

Quédate de Quevedo se convirtió en un auténtico hit veraniego en el verano de 2022. No había discoteca que no la pusiera para jolgorio de sus asistentes. Año y medio después, esa canción se ha convertido en el lema con el que los socialistas tratan de convencer a Pedro Sánchez de que continúe como presidente del Gobierno. Porque sonó en Ferraz y 24 horas después lo ha hecho en València, frente a la sede del PSPV en la calle Hospital, donde cargos de la formación, militantes y simpatizantes, 1.500 personas según Delegación de Gobierno, se han reunido para convertir la incertidumbre de las horas previas a la decisión de Pedro Sánchez en una fiesta. 

Banderas rojas del partido al aire, pegatinas de rosas, corazones y con el lema Perro Sanxe y música, mucha música, han hecho este domingo de la pequeña plaza al lado de la Avenida del Oeste la réplica a la madrileña calle Ferraz; entre la discoteca y el diván colectivo de los socialistas. Porque a Quédate se unió Pedro, Pedro de Rafaela Carrá, Resistiré del Dúo Dinámico, Cuando tú vas de Chenoa o hasta La internacional. Un cóctel de baile, gritos de apoyo al presidente del Gobierno, argumentos para salir en su defensa y comentarios de preocupación en privado de quienes ostentan responsabilidades.

Cientos de personas se concentran en València en apoyo de Pedro Sánchez

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De estos la nómina ha sido elevada con representación de distintas instituciones, aunque con ausencia de la secretaria general, Diana Morant. La delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé, el vicesecretario general del partido, Carlos Fernández Bielsa; el secretario de Organización, Vicent Mascarell; diputados en las Corts como Mercedes Caballero, Ernest Blanch, José Chulvi, Benja Mompó o el síndic José Muñoz; la senadora Rocío Briones; representantes en el Congreso como Carmen Martínez o Víctor Camino, el secretario de Estado, Arcadi España, o alcaldes como el de Silla Vicent Zaragozà o el de Burjassot, Rafa García, se han unido a militantes de base para cantar Resistiré, Sobreviviré o Perra, canciones convertidas en mensajes directos a su líder.

"Estamos aquí todas las personas que creemos en la convivencia para decirle a Pedro Sánchez que merece la pena", ha señalado Pilar Bernabé. "Nos hemos unido la sociedad civil, la militancia y los simpatizantes socialistas para trasladar que estamos hartos que la política se haya convertido en una trituradora de personas decentes", ha indicado Bielsa. "Le enviamos todo nuestro cariño al presidente para que continúe", ha expresado Muñoz "No es solo la defensa de un gobierno, es de la democracia", ha agregado Sandra Gómez, portavoz del partido en València.  

Declaraciones que se han ido mezclando con las sensaciones de militantes de base. "Están intentando echar a un presidente de manera sucia, venimos aquí a defender a Sánchez y la voluntad popular", dice Alejandro, que ha acudido desde Chera. "Somos el Partido Socialista y no podemos permitir lo que quieren hacer", explican Ángeles García y Mercedes Martínez, de Paterna. "No sabemos lo que va a pasar, pero estamos más unido que nunca", dice Álex, un joven de València que luce varias chapas del partido.

Simpatizantes y autoridades en la concentración de apoyo a Pedro Sánchez en València

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A ellos se ha unido, en una aparición que ha desatado la algarabía de los presentes, el expresident de la Generalitat, Ximo Puig. "Hay que ser muy conscientes de lo que nos estamos jugando", ha señalado al tiempo que ha remarcado España "ahora es vista como un país de esperanza y que crece económicamente". El embajador ante la OCDE ha sido uno de los que más peticiones de fotografía ha recibido de los simpatizantes de la formación presentes en la protesta festiva. Pero no el único, porque la coincidencia de cargos y militantes ha hecho de los selfies una acción más del momento.

La cuestión de cómo sea recordado dependerá de lo que haga Sánchez este lunes. Porque aunque la estampa pareciera la de una victoria electoral, la situación de los socialistas pende del hilo que comunique el presidente del Gobierno. De ahí que muchas caras, especialmente entre quienes ostentan cargos, no fueran exactamente de alegría por mucho frenesí que hubiera alrededor. Se denota la preocupación ante un posible adiós del jefe del Ejecutivo que nadie descarta. De hecho, hay quien cree que esa será la decisión que finalmente tomará.

"Estamos de huelga de oxígeno", trasladaba un dirigente socialista en privado como forma de evidenciar esa contención de respiración en la que vive el partido. "Estamos ante un escenario complejo o uno complejísimo", expresaba otro señalando que aunque Sánchez finalmente se quede, la situación que se abrirá no será sencilla. Y aunque hay quienes muestran "esperanza" y "optimismo", lo más compartido es que nadie sabe nada y que ante la incertidumbre, al menos, los socialistas han demostrado músculo. Y ganas de celebrar, aunque no se sepa todavía el qué.