Asempleo reclama que se impulse el plan de activación para el empleo que entró en funcionamiento el pasado mes de enero, tras un acuerdo entre el Gobierno y los agentes sociales y del que sólo se habían consumido 97,2 millones hasta julio. Según la patronal de las agencias de colocación privadas, la tasa de cobertura por desempleo ha descendido hasta el 58,5 por ciento y sólo 56.573 personas, el 2,5por ciento del total de parados, se están beneficiando actualmente del programa.

El plan busca activar la capacidad y la motivación de los parados de larga duración que hayan agotado las posibilidades de protección por desempleo e incluye una ayuda económica de acompañamiento de 426 euros, el 80 por ciento del IPREM durante seis meses compatible con un contrato de trabajo por cuenta ajena.

Según Asempleo, las empresas no están aprovechando suficientemente esta oportunidad de crear puestos de trabajo accediendo a candidatos derivados por los Servicios Públicos o las Agencias Privadas de Empleo y con una bonificación importante del salario de los mismos.

Más recursos técnicos

Por este motivo, considera «preciso» hacer una mayor difusión y explicación del programa, tanto a empresas como a posibles beneficiarios, y, por otra parte, dotar recursos que se van a liberar como consecuencia del descenso del gasto en prestaciones por desempleo. A su parecer, es muy importante vincular las políticas pasivas de empleo (prestaciones) con las políticas activas (orientación, formación y colocación) para llevar a cabo una estrategia combinada que evite el estancamiento en el desempleo y favorezca la rápida inserción de estas personas en el mercado laboral.

El presidente de Asempleo, Andreu Cruañas, cree que las agencias privadas de colcación «pueden y deben complementar y dotar de mayor capacidad, capilaridad territorial y sectorial y dotación de recursos técnicos, la labor que realizan los Servicios Públicos de Empleo».