Los cuatro socios fundadores de Streamloots están viviendo su particular sueño americano. Vicent Marí, José Miguel González, Javier Pastor y Alberto Martínez llegaron hace unos días a Silicon Valley para participar en el programa de aceleración de Timothy C. Draper, uno de los pilares del ecosistema emprendedor de San Francisco. El fondo de Draper, Draper Venture Network, ha invertido 50.000 dólares en la startup valenciana y se hace cargo de la estancia durante los tres meses que dura el programa de aceleración. El equipo de Streamloots ha dado el salto a Estados Unidos de la mano de la compañía valenciana Bbooster, que hace un año se alió con el fondo Draper Venture. El inversor americano ha visto un gran potencial en la startup valenciana, que ha diseñado un sistema para que los youtubers ganen dinero con sus vídeos. El objetivo de los cuatro emprendedores es captar fondos en el área de la bahía de San Francisco tras el proceso de aceleración y quedarse en Estados Unidos para impulsar el crecimiento de la compañía.

Aunque a algunos en España les pueda parecer extraño, el fenómeno de los youtubers que juegan en internet ( gamers en la jerga tecnológica) es un auténtico filón en países como Corea del Sur o Estados Unidos. Son jugadores que tienen millones de seguidores. Sin embargo, a pesar de su enorme éxito tienen problemas para rentabilizar el tiempo que pasan delante de la pantalla del ordenador. Los fundadores de Streamloots han inventado un sistema que les permite ganar dinero con sus seguidores y que consiste en que los youtubers ofrezcan cofres sorpresa con recompensas a cambio de dinero. La sorpresa del cofre puede ser que el youtuber se ponga a hacer abdominales en directo, que cante una canción o cualquier otro tipo de reto divertido. La idea funciona. En la primera prueba que hicieron con un gamer ganaron 2.000 euros en una hora con los cofres que compraron los seguidores. El sistema está basado en la tecnología blockchain, que transmite la información por bloques y que está causando furor. La empresa ha llamado la atención del fondo americano por su potencial para crecer de forma exponencial.

Alberto Martínez explicó a El Mercantil Valenciano desde Silicon Valley que comprobaron que las personas con éxito en la plataforma de vídeos Youtube ganaban dinero con la publicidad, pero podían incrementar sensiblemente sus ingresos con la venta de beneficios digitales como los cofres que son como sobres sorpresa (stream loots es un juego de palabras en inglés que significa el botín por emitir en directo). «El modelo de negocio tiene mucha tracción porque los jugadores ya disponen de una gran base de seguidores que están dispuestos a pagar para interactuar con ellos», señaló. Martínez destacó que el primer mes del programa de aceleración «está centrado en la mejora del producto. Nuestro objetivo final es conseguir financiación. Lo más importante durante los tres meses que vamos a estar aquí es crecer. Aquí en las primeras fases la facturación no es tan importante como en España, lo que buscan es que el producto sea adictivo y genere interacción».

Veinte startups

Alberto Martínez precisó que llegaron a Silicon Valley el 12 de febrero. «En la aceleradora de Draper estamos veinte empresas y somos los únicos españoles. A los tres meses tenemos que volver a España porque aquí son muy estrictos con los temas de inmigración, pero nuestra idea es volver», aseguró. El responsable de Streamloots añadió que en el día a día están recibiendo mucha formación financiera. «Lo que llama la atención aquí es que lo llevan todo a rajatabla. Fijan una reunión de treinta minutos y a los treinta minutos se levantan y se van». Martínez incidió en que el gran potencial que tiene la aceleradora de Draper es que «está muy conectada con los inversores de Silicon Valley».