La cautela que tenía Amadeo Salvo, consciente de que para verse entre los 32 clubes que disputan la Champions hay que superar una eliminatoria previa, se desbordó en un grupo que cuando vio marcar el gol del triunfo de Paco Alcácer explotó de alegría. «Lo necesitábamos, hubiera sido injusto otro final», era una de las reflexiones más repetidas por los jugadores, entre los que destacaba Dani Parejo y una camiseta que no pasó desapercibida en la que se podía leer: «Back to the Champions» con una fotografía suya celebrando un gol y el logo de la máxima competición continental. El capitán ha sido uno de los grandes artífices de esta excelente temporada, conversó unos minutos con Layhoon Chan antes de subirse al avión, y cuando sus compañeros se percataron de la camiseta que le entregaron y se puso€ sólo querían fotografías con él.
Nada más subir al avión comenzó la fiesta, con una alegría desbordada por parte de Rodri De Paul, que es quien lleva la música en el vestuario, y Yoel, que tuvo unos minutos en Almería. Todos de pie se pusieron a tararear canciones de Juan Magán. En la parte trasera del avión no faltaron las bromas, un poco de música, muchas risas, palmas€ el reconocimiento al trabajo bien hecho. Se había sufrido mucho, porque no llegaba el gol de la victoria que se necesitaba para invalidar el triunfo del Sevilla en Málaga. Los primeros en desfilar por el vestuario fueron los canteranos, Rodrigo, sus rostros irradiaban felicidad, pero lo mejor se lo dejaron para el avión, cuando se coreó un mensaje que le llegó al fondo.
«Otamendi quédate, Nico quédate» le cantaban los compañeros al central argentino durante el vuelo. Es muy querido y todos le consideran una pieza clave en el equipo, no sólo por su rendimiento sino por lo que significa. Seguramente otro club aspira a ofrecerle un contrato económicamente superior al del Valencia CF, pero los compañeros que se ha encontrado en el vestuario utilizan todo tipo de estrategias para que se quede. Sería un éxito, y su futuro se abordará en breve, una vez ha finalizado el campeonato.
La única cara negativa fue la de Diego Alves. Abandonó el estadio con una muleta y la rodilla derecha envuelta de hielo. Se teme lo peor, motivo por el que la presidenta ejecutiva Layhoon Chan quiso interesarse por su estado. Hoy le harán pruebas médicas, pero las sensaciones son muy malas. Ya en el avión fue el primero en dejar las lágrimas de rabia que se dejó en el vestuario por la sonrisa que significó regresar a la Champions. Era imposible no contagiarse por el ambiente, y utilizando el micrófono de la tripulación, cuando veían que álguien «amenazaba» con registrar el momento, envían el siguiente mensaje: «Atención, turbulencias, siéntense». No pararon ni un instante, hasta salió en el vuelo el nombre de Cristiano Ronaldo, o se reclamó a Javi Fuego que sacara «las gaitas de Asturias», antes de bromear diciendo: «¡Cuidado que te quemas! Javi Fuego». Y seguían reclamando «cerveza» para la parte trasera del avión. «Que siga el vuelo a Ibiza», pedía uno, antes de cantar «Cinco minutos más», de Juan Magán. Hubo más mensajes: «Voro, aunque lo hagas todo al revés, el equipo te quiere», «Rui (Silva), a ver cuando aciertas un once», «Rieta, eres el mejor cocinero del mundo», todos los técnicos tuvieron su recadito, pero también quedaba Alves: «Diego, el que para todos los penaltis de la liga», antes de decirle «Maradona es más grande que Pelé». Sólo faltaba Nuno, y llegó su turno: «Creó una relación muy linda con Otamendi cuando le dejó la chaqueta en Vallecas», y el colofón: «Salí con la manga corta a entrenar». No pararon de reír.
Peter Lim invitó a cenar a la plantilla
Nada más aterrizar en Manises, esperaba al grupo Peter Lim, que para culminar la velada invitó a toda la plantilla a cenar, junto al cuerpo técnico, y también a los consejeros. Fue la última cena de todos, en una marisquería del centro de la ciudad, ya que ahora hay jugadores que se marchan con sus selecciones, pero en el momento de la despedida, ya comenzarán a descontar los días para volverse a reencontrar tras las vacaciones€ para ponerle guinda certificando la clasificación para la Champions.
En el aeropuerto fueron recibidos por 600 personas, que pidieron que saltara el equipo, Peter Lim, Nuno€ Fiesta total.
