El alcalde de Valencia, Joan Ribó, ha decidido echarle un pulso al Gobierno y mantiene para hoy la convocatoria del Consejo Rector Valencia 2007, a pesar de que el Gobierno le ha desautorizado y le ha pedido, este mismo fin de semana, que desconvoque la reunión. Ribó busca así dejar en evidencia el desinterés del Gobierno central por el futuro de la Marina Real, asfixiada por las deudas con el banco Santander.
Después de meses sin responder al teléfono para fijar una fecha para reunir al consejo y buscar soluciones a la deuda de la marina „gran parte de la cual ha asumido el Estado como avalista„, el alcalde, Joan Ribó, anunció hace unas semanas que se celebraría un consejo urgente para resolver dos contratos que caducarán en los próximos meses (seguridad y mantenimiento). El Gobierno, sin embargo, ha desautorizado al presidente del consejo, esto es al alcalde, y este mismo fin de semana, tal como avanzó este diario, el Gobierno ha solicitado que se anule la reunión porque el gobierno está en funciones y no considera conveniente que se adopten acuerdos que puedan hipotecar a futuros gobierno.
Para el alcalde, se trata de un nuevo desplante del Gobierno central, en especial, del secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, mano derecha del ministro Cristobal Montoro, al que reprochan que se haya desentendido de la marina real y de la renegociación de las deudas con los bancos, en concreto del Santander, al que un juzgado ha autorizado a embargar las rentas generadas por todas las concesiones de la marina, entre ellas las del «Veles e Vents» y el centro de emprendedores de la Fundación Edem.
El consejo rector urgente se tenía que celebrar «de manera virtual», a través de videoconferencia y por correo electrónico, órgano del que es vicepresidente Antonio Beteta. El gobierno local lamentó ayer que Beteta se haya «descolgado a través de un correo electrónico enviado este fin de semana con la petición de que se desconvoque argumentando que el Gobierno central se encuentra en situación de interinidad».
Ribó convocó el Consejo Rector de este organismo, conformado por la administración central, autonómica y local y responsable de la gestión de la Marina Real Juan Carlos I, para «abordar los contratos de seguridad y mantenimiento que requiere este espacio de la ciudad para su normal funcionamiento». El primer edil ha pedido al Ejecutivo central que ejerza su papel y responsabilidades a pesar de estar en funciones.
El alcalde censuró ayer la petición de Administraciones Públicas como un «intento de sabotaje» a la Marina Real y advirtió del riesgo de que este espacio pueda quedar «sin contratos de seguridad y mantenimiento».
«El Consejo Rector mantiene su convocatoria para mañana martes y espero que todos sus miembros ejerzan su responsabilidad», remachó ayer Ribó. Así, insistió en que «el aún Gobierno de Mariano Rajoy no puede hacer dejadez de sus funciones» y recalcó que «tiene que asumir sus responsabilidades».
«Es como si se negaran a pagar las nóminas de sus trabajadores públicos sólo por estar en interinidad. El Gobierno de Rajoy parece que se quiere ir por la puerta grande en cuanto a Valencia», agregó el alcalde.
Fuentes municipales explicaron que los contratos que se tienen que licitar en la citada reunión tienen que ver con la seguridad del recinto de La Marina, puesto que el contrato actual finaliza el 5 de mayo, y el de mantenimiento acaba en el mes de octubre. Los dos contratos tienen una duración de un año, prorrogable por otros doce meses. La licitación del contrato de vigilancia y seguridad asciende a 330.000 euros más IVA, mientras que el de mantenimiento integral asciende a 442.000 euros más IVA. Asimismo, comentó que el Consejo Rector del Consorcio Valencia 2007 se ha convocado de manera virtual para que todos los miembros que forman parte de este organismo puedan emitir sus votaciones telemáticamente desde las 9 hasta las 13.
Junto a Joan Ribó como presidente forman parte del Consorcio, como vicepresidentes el secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, y el conseller de Hacienda y Modelo Económico, Vicent Soler.
Cada una de las tres administraciones tiene, además, cuatro consejeros en esta entidad. Ribó manifestó que en el Gobierno «saben que no podemos dejar un espacio importante de la ciudad como es la Marina Real sin la vigilancia y el mantenimiento oportunos». «Queda por ver cuál es el grado de responsabilidad que ofrece el Gobierno central», dijo ayer el alcalde.
