Una de las claves que ha posibilitado la cesión de las obras de arte ha sido la ubicación futura de la colección. El Museo de las Clarisas se instalará en las salas del antiguo hospital de Sant Marc, un edificio gótico del siglo XV levantado a las órdenes de Pere March, padre del poeta. La decisión no ha sido casual. A pesar de que allí se ubicó hace años el Museu Arqueològic, el Ayuntamiento de Gandia y la comunidad de monjas de clausura pactaron el hospital de Sant Marc porque permitirá que las religiosas puedan visitar, cuando lo deseen, las obras de arte. La proximidad del convento al antiguo hospital permitirá habilitar un acceso junto a la muralla medieval para que las monjas no tengan que salir a la calle para visitar el museo. s. s. gandia