El paisaje de l'Hort de Trènor de Torrent, un botánico que encierra unas 80 especies arbóreas de alto valor y otras tantas arbustivas, ya no será el mismo que tuvo en sus años de esplendor. La edificación de un bloque de viviendas, en construcción actualmente, prácticamente pegado al vallado de la zona donde está el centro ambiental del parque ha desdibujado la estética para siempre.

Desde la concejalía de Medio Ambiente de Torrent, el concejal popular José Gozalvo critica la "pésima planificación" del gobierno socialista al aprobar hace años el desarrollo del sector urbanístico junto al parque "y más cuando es un espacio declarado Bien de Interés Cultural (BIC) mucho antes, lo que implicaba haber respetado unas distancias y creado un entorno de protección, tal y como marca la legislación".

L'Hort de Trènor era una de las tantas propiedades de la saga nobiliaria de los Trènor en la comarca de l'Horta, que pasó a ser municipal a principios de los años 80, a través de una negociación del ayuntamiento con los dueños. Aquella adquisición culminaba un proceso de reivindicación ciudadana de la década de los 70. Entonces se produjo la cesión de todo el botánico y la casa, a cambio de que el resto de terrenos de los Trènor se convirtieran en urbanizables con uso residencial.

Allí se instaló un centro ambiental por el que pasan decenas de escolares, el Cefire de zona de la Conselleria de Educación y el retén de la Policía Local.

Bloques de cinco alturas

El desarrollo efectivo del sector urbanístico, no obstante, ha llegado en los últimos años. Primero se construyeron varias fincas que ya afectaron a la estética del espacio central, donde se realizan numerosos actos culturales, festivos y sociales. No obstante, ha sido en los últimos meses, al construirse otro inmueble de cinco alturas, cuya fachada queda a escasos 2,5 metros de la valla, cuando se ha generado un mayor impacto sobre las especies arbóreas de tipo ambiental y paisajístico, y se augura un problema con los futuros vecinos. "Las hojas de las palmeras entrarán por las ventanas", explica Gozalvo. El concejal lamenta que en su día no existiera mayor previsión para evitar lo que ha pasado. "Había otras formas de cumplir con los propietarios y no dañar el parque.