En la lucha por evitar los eventos de supercontagio hay una expresión que sirve de escudo: que corra el aire. La expresión es casi una ley no escrita, pero sí recomendada, para los espacios interiores en la batalla contra la covid. Las sucesivas investigaciones apuntan a que los aerosoles, diminutas gotículas con presencia del virus, son las principales causantes de los contagios del Sars-Cov-2. De ahí que ese viento circulante se convierta en un aliado, aunque es fundamental saber cómo hacerlo.

«La clave está en una ventilación continuada, cruzada, repartida y medida», señala el coordinador de Mesura, José Manuel Felisi, uno de los autores de la Guía de ventilación de espacios interiores que la Generalitat está distribuyendo entre bares, restaurantes, hoteles, museos, cines y «otros lugares donde se comparte el aire que se respira».

El objetivo es incentivar un buen tránsito del aire en estos locales ya que, como señala el documento elaborado por el CSIC y Mesura en colaboración con la Administración autonómica, «en ambientes interiores mal ventilados, los aerosoles de una persona infecciosa se distribuyen por todo el espacio con el riesgo de que otras personas se contagien al inhalarlos».

«Nos hemos dado cuenta con numerosos estudios que solo con la ventilación natural se soluciona gran parte de los problemas», explica Felisi. Así, expone que esta ha de ser cruzada, es decir, con ventanas y puertas opuestas; continuada, no con grandes aperturas y grandes espacios de tiempo cerrado; repartida, «es mejor cuatro ventanas abiertas a 10 centímetros que una a 40» y medida a partir del control del CO2. «Tenemos herramientas baratas y asequibles para hacerlo», señala.

Cuando lleguen los clientes

En la guía de la Generalitat Valenciana señala a su vez que se podrá comenzar a abrir para hacer la ventilación cuando comiencen a llegar los clientes y que al finalizar la jornada se deberá hacer una completa y duradera que permita renovar la totalidad del aire. Asimismo, indica que la diferencia de temperatura entre el interior y el exterior ayuda a que la ventilación se acelere debido a la diferencia de presión.

Pero no se queda solo en medidas de abrir o cerrar ventanas sino que recomienda evitar las grandes masificaciones, el uso de las mascarillas y hace hincapié en «no gritar» ya que es el momento en el que se emiten más gotículas al ambiente. Para Felisi, no obstante, estas medidas no son solamente para este periodo de pandemia sino que la ventilación «ha venido para quedarse».