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Crisis climática

Los niños y niñas valencianos son los que más sufrirán el cambio climático

Un informe de Save The Children alerta de que la Comunitat es el lugar donde más impactará la crisis ecológica junto a Andalucía, Murcia, Castilla - La Mancha y Extremadura | Uno de cada tres menores está en riesgo de pobreza

Varios niños con su padre en un barrio empobrecido de València, durante la ola de calor de este verano. Fernando Bustamante

Los niños y niñas valencianos son los que más van a sufrir las consecuencias del cambio climático en España, según un informe de Save The Children. El documento advierte de que la Comunitat está entre las autonomías con más menores en riesgo de pobreza, y por lo tanto, más vulnerables a la emergencia ecológica, junto a Andalucía, Murcia, Castilla La Mancha y Extremadura.

En total uno de cada tres niños y adolescentes que viven en la Comunitat están en riesgo de pobreza, lo que supone que casi 340.000 viven en esa situación, según los últimos datos oficiales de la Encuesta de Condiciones de Vida de 2022.

El director de Save the Children en la Comunitat, Rodrigo Hernández, explica que cambio climático y pobreza son inseparables. Si al factor de la pobreza se se le suman los fenómenos climáticos extremos (como olas de calor, sequías o DANAS) "el riesgo de que la infancia vulnerable se vea afectada se multiplica".

Es sencillo. "No es lo mismo pasar una ola de calor a 43 grados en un piso pequeño sin aire acondicionado que en un chalet con piscina", explica Hernández. Añade que "lo empezamos a notar con la pobreza energética, pero estos niños y adolescentes ya están viviendo las consecuencias del cambio climático, y esto condiciona su presente y futuro".

Un padre con sus hijos en un barrio empobrecido de València durante una ola de calor este verano. Fernando Bustamante

En los países como España el impacto está siendo mucho menor que en las regiones más empobrecidas del planeta, pero lo será "mientras nos lo podamos permitir", dice Hernández. "Muchísimas familias ya no pueden pagar para tener la casa a una temperatura adecuada ni en invierno ni en verano", explica. "A eso hay que sumar la carestía de los combustibles y la subida de todos los precios, que afecta y mucho a la calidad de vida de los niños y niñas". Por este motivo, Hernández hace un llamamiento a la acción contra el cambio climático. "Si no hacemos algo para pararlo, esto se va a incrementar exponencialmente".

Según la última encuesta de condiciones de vida del Instituto Nacional de Estadística (INE), casi el 18 % de las familias con menores han tenido retrasos en el pago de las facturas de suministros o la vivienda, y una de cada diez no han podido mantener la temperatura adecuada en invierno. Además, un estudio presentado recientemente por la Universitat Politécnica de Valencia y el Instituto Valenciano de Edificación (IVE) asegura que cerca del 25 % de la población (1.2 millones de valencianos) sufre pobreza energética, y advierte de que el fenómeno podría crecer un 17 % este invierno.

Según el último informe de la Red Europea de Lucha Contra la Pobreza (EAPN, por sus cifras en inglés), uno de cada tres valencianos está en riesgo de pobreza. Además, 559.404 están en pobreza severa, lo que significa que viven en hogares con ingresos inferiores a 530 euros al mes. Para el caso de una familia con dos adultos y dos niños significa sobrevivir con menos de 278 euros por persona. Esta situación afecta al 11 % de la población.

Otro indicador preocupante es la pobreza material severa (PMS), que implica, por ejemplo, no poder permitirse un plato de carne o pescado dos veces a la semana. Esta realidad afecta actualmente al 7,6% de la C.Valenciana y llega a 384.418 personas en nuestro territorio en 2021, eso sí, ha descendido porque en 2020 llegaba a 577.874 personas.

Otra realidad es la Baja Intensidad de Trabajo en los Hogares (BITH), que se refiere a las personas entre 0 y 64 años que viven en hogares en los cuales se trabaja menos del 20% de su potencial total de empleo, el informe señala que el 11,1 % de la población menor de 64 años residente en la C.Valenciana vive en hogares con baja intensidad de empleo. La cifra supone un ligero crecimiento y hablamos de 450.296 personas que en la C.Valenciana viven en esas circunstancias. 

Varios niños de un barrio empobrecido junto a dos adultos durante una ola de calor este verano en València. Fernando Bustamante

Doblemente vulnerables

Se estima que 774 millones de niños y niñas en el mundo -un tercio de la población infantil mundial- viven con el doble impacto de la pobreza y la crisis climática, según Save the Children. En España, el 27% de los niños y niñas sufren esta doble amenaza y en números se traduce en más de 2,2 millones de niños y niñas.

La ONG ha escuchado a 54.000 niños y niñas en una importante consulta realizada entre mayo y agosto de 2022 para conocer sus impresiones, preocupaciones e intereses sobre la crisis climática. En el informe se recogen todas sus respuestas, como la de Luciano, de 12 años.

Su familia perdió su casa después de que el ciclón Ana arrasara la isla donde vivían y ahora vive en un campo de desplazados en Malawi. Su familia, dice Luciano, salió de la casa y se subió a un árbol, pero el hermano menor fue arrastrado por las inundaciones.

"Nos trasladamos al campamento porque se desbordó el río y nos sorprendió por la noche. Nuestros animales empezaron a salir de la casa. Todos empezaron a ser empujados en círculos por la fuerza del agua. Intentamos salvar a los patos y a las gallinas, pero lo único que conseguimos salvar fue algo de nuestra ropa. Aun así, tengo esperanza y me gustaría volver a vivir la vida que llevaba antes de las inundaciones".

La directora general de Save the Children International, Inger Ashing, ha indicado que "en todo el mundo, las desigualdades están agravando la emergencia climática y sus impactos, sobre todo para los niños, niñas y familias con bajos ingresos".

Ashing añade que "dada la magnitud del desafío, sería fácil caer en la desesperación". "Pero debemos aprender de niños como Luciano que luchan por un mundo más verde y más justo. Es necesario que impulsemos distintas acciones junto a los niños y niñas para poner fin a la crisis climática y de desigualdad, e impulsar la protección y el cumplimiento de sus derechos", apunta.

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