Educación

El distrito único dispara la demanda de familias en los mejores colegios de València

Algunas concertadas están atendido a un 30 % más de padres y que el año pasado, al poder aplicar familias de toda la ciudad, y no de una sola zona

"Hay familias que cambian a su hijo en mitad de la ESO solo para tener plaza reservada en Bachillerato", explica el director del IES Lluis Vives

Alumnado dando clase en el IES Lluis Vives de Valencia.

Alumnado dando clase en el IES Lluis Vives de Valencia. / Germán Caballero

Gonzalo Sánchez

Gonzalo Sánchez

Abril es mes de peregrinaje de padres y madres en busca del futuro colegio de sus hijos. Empiezan las jornadas de puertas abiertas, las visitas a centros y las investigaciones por internet para encontrar el mejor centro educativo posible. Normalmente, es una odisea en las ciudades, pero este año se le añade un elemento más: el distrito único escolar.

Hasta ahora, las familias estaban limitadas por un sistema de puntos a elegir los colegios de su distrito, y no podían salirse de ahí. Sin embargo, el Consell aprobó recientemente el distrito único escolar, por el cual padres y madres pueden elegir cualquier centro escolar de la ciudad, aunque esté en la otra punta. La medida afecta, en la práctica, a las localidades grandes y deja igual a los pueblos, eso sí, mantiene un sistema de "zonas limítrofes" y rebaja los puntos para familias de fuera de la ciudad.

Esto, aplicado a ciudades como València, supone un gran cambio para las familias. En concreto tienen 10 veces más posibilidades de elegir colegio el curso que viene con el distrito único. Las de València podrán elegir entre 177 colegios en lugar de 14, las de Alicante entre 50 en vez de 9 y las de Castellón entre 85 en vez de 8.

Clase de Bachillerato en el IES Lluis Vives de València.

Clase de Bachillerato en el IES Lluis Vives de València. / Germán Caballero

De momento este nuevo sistema ha provocado que se disparen las solicitudes de familias en los centros de renombre de València, tanto públicos como concertados. El CEIP Gran Asociación de València, por ejemplo, ya registra un 30 % más de visitas y el IES Lluis Vives (de los más solicitados cada año) también ha visto un gran repunte.

Aspectos importantes

La admisión escolar aún no tiene fechas fijas, pero comienza después de Semana Santa y las familias tienen de tiempo hasta la última semana de abril para presentar sus solicitudes por vía presencial o telemática. El distrito único facilita que se pueda elegir cualquier centro de la ciudad, pero siguen primando en los puntos cuestiones como tener un hermano o hermana en el centro, la renta, discapacidad o ser víctima de violencia de género.

El Lluis Vives, por ejemplo, ni siquiera hace días de puertas abiertas ya que tiene las aulas a reventar y da clase mañana y tarde. Sí que hace visitas para el alumnado de los colegios adscritos. Lo más deseado en todos los centros siempre es el Bachillerato; la llave para acceder a una carrera universitaria. "Tenemos familias que intentan varios cursos meter a su hijo o hija en la ESO para así 'reservarse' una plaza en Bachillerato", explica su director Valentín Bayarri.

Clase de Bachillerato en el IES Lluis Vives de València.

Clase de Bachillerato en el IES Lluis Vives de València. / Germán Caballero

Pedro Ramírez, director del centro concertado Gran Asociación, explica que la demanda se ha disparado este año. "De momento ya tenemos un 30 % más de visitas", cuenta. Ellos sí que hacen puertas abiertas, pero personalizadas para cada familia. "Nos dimos cuenta de que, si enseñábamos el colegio a muchas juntas, algunas se cohibían a la hora de preguntar alguna cosa acerca de sus hijos que no querían que el resto supiera, así que ahora hacemos visitas de una hora a cada familia", cuenta.

Para Ramírez el distrito único es una medida positiva ya que "permite elegir a la familia el colegio que más se ajusta a su línea de valores, y no se ven atados al de su zona". De hecho, explica que se están dando situaciones poco habituales, como que las muchas familias estén solicitando plaza a mitad de etapa de enseñanza. "Nos han llegado muchas familias para segundo de Primaria o tercero de la ESO, y eso no es habitual", cuenta Ramírez.

Un punto decisivo

El distrito único que plantea el Consell es un reflejo del aprobado en 2013 por la entonces consellera María José Catalá (PP), y al igual que entonces la clave está en un punto de libre asignación que pueden dar los centros en base a "criterios objetivos". Muchas de las concertadas, como Gran Asociación, usarán darán ese punto a padres y madres que sean antiguos alumnos del centro. "Queremos premiar así la fidelidad de las familias", cuenta Ramírez.

Clase de Bachillerato en el IES Lluis Vives de València.

Clase de Bachillerato en el IES Lluis Vives de València. / Germán Caballero

Este aspecto ha sido el más criticado de la nueva ley, y entidades como la confederación de Ampas Gonzalo Anaya (mayoritaria en la pública) consideran que este punto servirá para que las concertadas puedan filtrar a su alumnado por renta y clase social.

El IES Lluis Vives explica que aún no sabe cómo asignarán ese punto, ya que la nueva ley no está aprobada en firme, pero su director asegura que intentarán darlo por "criterios lo más objetivos posible". De hecho, según el decreto, es el Consejo Escolar el que debe dar el visto bueno definitivo a estos criterios definidos por las escuelas.

Buena nota para Bachillerato

Otro aspecto que dirimirá la admisión de muchos estudiantes y que ya ocurría con el anterior decreto es la nota media del alumnado. Eso sí, solo para entrar a Bachillerato, que es la etapa más demandada en los colegios de renombre de València.

En el IES Lluis Vives, destacado por su Bachillerato Artístico, ya tienen más alumnado de estos dos cursos que en toda la ESO. "Tenemos más de 500 estudiantes de Bachillerato y unos 350 en toda la Secundaria", cuenta Bayarri.