Roban el burro del belén de Vallada y aparece subido a una fuente en Moixent
El suceso recuerda a una antigua tradición vandálica que solía registrarse por estas fechas y el ayuntamiento va a revisar las cámaras para intentar identificar a los responsables
El burro robado del belén de Vallada, en la fuente de la plaza Mayor de Moixent.
La figura del burro del belén de Vallada apareció la pasada noche reposando plácidamente sobre el pedestal de la fuente de la plaza Mayor de Moixent tras ser víctima de un robo. La gamberrada recuerda a una antigua tradición que los jóvenes de esta segunda localidad solían protagonizar hace años.
La noticia ha corrido como la pólvora en las dos poblaciones vecinas. El pesebre de Vallada sufrió un ataque en la noche de este viernes y sus figuras fueron violentadas. Los vándalos tumbaron el cristal que protege el belén -y que se colocó precisamente para resguardarlo de las actuaciones incívicas- y sustrajeron el burro de gran tamaño para llevárselo consigo. Las figuras de San José y la Virgen María a tamaño natural han aparecido este sábado tumbadas y cubiertas de paja tras el golpe sufrido por la caída del cristal.
Las figuras del belén de Vallada, tumbadas tras el acto vandálico.
El suceso se produjo tras una tarde de fiesta en Vallada. Preguntada por este diario, la alcaldesa de este municipio, Mª José Tortosa, señala que van a revisarse las cámaras instaladas en las inmediaciones del belén y que si se reconoce a los autores del acto vandálico se les impondrá la sanción pertinente. En cualquier caso, Tortosa resta importancia al incidente y subraya que se trata de una "anécdota sin mayor importancia". La figura del burro, de hecho, ha vuelto al pesebre de Vallada sin mayores dificultades.
Una "tradición" de hace décadas
A principios de 2004, el Ayuntamiento de Vallada denunció que un grupo de jóvenes de Moixent había procesionado burlescamente en Nochevieja una imagen de la Virgen que fue robada del Belén del pueblo. Previamente, los alborotadores coronaron la imagen con la cabeza de un burro y, a continuación, la hicieron añicos pisoteándola y quemaron la talla.
Aunque en ese momento los jóvenes llevaban años acudiendo a Vallada durante las Navidades para robar el burro del Belén, en esa ocasión no pudieron hacerlo porque estaba demasiado sujeto, por lo que los vándalos optaron por arrancar la imagen de la Virgen María. El consistorio reforzó la seguridad del pesebre para evitar destrozos, pero este año de nuevo se han vuelto a repetir.
El incidente recuerda el robo del niño Jesús que sufrió el año pasado el belén municipal instalado en Canals. La figura apareció días más tarde tirada en una fuente cercana. El ayuntamiento de esta localidad de la Costera también se ha quejado este año de los daños ocasionados en el buzón real colocado para que los niños depositaran sus cartas a los Reyes. El elemento fue reparado y recolocado el 27 de diciembre, pero de nuevo fue destrozado y finalmente tuvo que ser retirado antes de tiempo.
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