Vallada, La Font, Moixent y Montesa defienden su territorio frente a la línea de alta tensión

Las alcaldías de Vallada, La Font de la Figuera, Moixent y Montesa se han reunido esta semana con la Subdelegación del Gobierno en Valencia para estudiar los trámites de la autorización para construir una línea de evacuación de alta tensión voltaica que cruzaría sus territorios desde el parque solar fotovoltaico Almansa 1.

Los alcaldes de estos municipios de La Costera han trasladado al subdelegado, José Rodríguez Jurado, cuestiones en torno a la instalación de esta línea que afectarían negativamente a su patrimonio cultural, rural y paisajístico. En 2023, el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico otorgó la autorización administrativa para la construcción de esta línea de evacuación eléctrica de 36 kilómetros de longitud que atravesaría las cuatro localidades.

María José Tortosa, alcaldesa de Vallada, cuenta a Levante-EMV que han salido «bastante contentos» de la reunión porque necesitaban «saber el estado del expediente» y, tras este encuentro, tienen «un poco más de fuerza» y quieren «escuchar a los vecinos». En la misma línea, Elio Cabanes, alcalde de La Font de la Figuera, expone que tenían «dudas» sobre este expediente. «Vamos a solicitar acceso al documento para ver qué alegaciones podemos hacer porque este proyecto no se adecua a los intereses de La Font ni a su patrimonio», comenta.

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Los ayuntamientos tienen «la última palabra»

«Aunque justamente el trazado que pasa por Vallada sí que estaría soterrado, hay otros tramos que afectarían a los territorios vecinos», comenta Tortosa. Ambos alcaldes sostienen que los cuatro municipios van «de la mano» y seguirán una línea «unánime» en cuanto a la toma de decisiones. Así, Cabanes explica que la «última palabra» la tienen los ayuntamientos, pues son quienes pueden conceder o no la licencia de obras.

«Llega un momento en el que La Font no parece un término municipal sino una red de servicios para el Estado español»

Elio Cabanes

— Alcalde de La Font de la Figuera

Este alcalde argumenta que intentarán que la nueva línea de alta tensión se adecue a los planes generales de ordenación urbana y, si no lo hace, pondrán «todos los impedimentos posibles para que no se lleve a cabo». Cabanes denuncia la «saturación» de infraestructuras como esta en su territorio, pues el valle de Montesa ya cuenta con una autovía, dos líneas de ferrocarril, dos de alta tensión, el gasoducto, el trasvase y la nueva línea proyectada. «Ya tenemos demasiadas infraestructuras en nuestro territorio y llega un momento en el que La Font no parece un término municipal sino una red de servicios para el Estado español. Tenemos que ayudar a este, pero queremos que se respete nuestro patrimonio», declara.

El Gobierno obliga a enterrar tramos de la línea de alta tensión de gran valor paisajístico

Aunque la Declaración de Impacto Ambiental otorgada al proyecto fue positiva, obligaba a la empresa de la instalación a eliminar 50 torres de muy alta tensión (de las más de 100 que había previstas) y a soterrar varios tramos del tendido eléctrico en zonas protegidas por su valor medioambiental y por su avifauna. No obstante, el alcalde de La Font de la Figuera explica que el soterramiento de la línea «también sería un problema porque significaría arrancar árboles que no sabemos si se podrán replantar, además de que hay una posible zona industrial a futuro que también pasa por ahí y este proyecto nos dejaría sin ella».

De esta manera, las alcaldías trasladaron al Gobierno las preocupaciones de los vecinos del territorio, pues esta instalación suscitó desde el primer momento numerosas alegaciones y el rechazo tanto de los propios ayuntamientos como de varias asociaciones ecologistas. Actualmente y según lo acordado en la reunión de esta semana, están esperando un trámite de audiencia con el Ministerio.

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