Leoncio Badía, el enterrador de los fusilados que ya es también un héroe cultural

Una canción de Futuro Terror y un cómic de Paco Roca y Rodrigo Terrasa recuerdan al sepulturero que salvó del olvido a los asesinados por el franquismo en Paterna

Una de las páginas de "El abismo del olvido" sobre la historia del enterrador Leoncio Badía.

Una de las páginas de "El abismo del olvido" sobre la historia del enterrador Leoncio Badía. / Astiberri

Voro Contreras

Voro Contreras

Hasta no hace demasiado, a Leoncio Badía solo le recordaban las personas para las que su figura fue fundamental: su familia y las de los fusilados a los que enterró en el cementerio de Paterna al concluir la Guerra Civil. A día de hoy, la historia del sepulturero que dejaba unos pequeños frascos con el nombre de los represaliados junto a sus cadáveres para que su identidad no se perdiera, es conocida e incluso reconocida con una escultura frente al camposanto paternero y una Alta Distinción de la Generalitat.

De un tiempo a esta parte, además, el enterrador de Paterna ha trascendido al mundo de la cultura en forma podcast, de proyecto fotográfico («Un acto de amor», de Pablo Chacón), de obra teatral (El enterrador, de Gerard Vázquez y Pepe Zapata), de novela gráfica (El abismo del olvido, de Paco Roca y Rodrigo Terrasa) e incluso de canción («Leoncio Badía», de Futuro Terror).

Fotografía del proyecto "A labor of love" de Pablo Chacón.

Fotografía del proyecto "A labor of love" de Pablo Chacón. / Pablo Chacón

Rock con carga política

«Los tengo que enterrar solo por ser de los suyos», canta el grupo valenciano en su último disco, en alusión al hecho de que Badía fue salvado del fusilamiento a cambio de ocuparse de los cadáveres de los «rojos» asesinados en el Paredón de España. «A mí la memoria histórica siempre me ha interesado -señala Jose Pazos, el compositor del tema-. Pero no fue hasta que una amiga me contó la historia de Leoncio cuando supe de su existencia, investigué y me flipó».

"Nos quieren olvidar / olvidan que somos muchos / testigo de su sufrimiento / identificaré sus restos", dice el tema.  En los menos de dos minutos y medio que dura la canción, Futuro Terror le da a «Leoncio Badia» toda la carga política posible. «Para mí es algo fundamental porque la derecha es experta en aludir a lo sentimental para despojar el contenido político de historias como esta o como la de Miguel Hernández o la de Antonio Machado». La banda considera haber cumplido el objetivo de «dignificar» el recuerdo de Leoncio cada vez que algún fan se les acerca agradecido por haberles descubierto su historia.

El abismo del olvido

Cuando el single se publicó en septiembre de 2023, Pazos se enteró de que no eran los únicos, de que Paco Roca y el periodista Rodrigo Terrasa preparaban también un cómic en el que Leoncio era uno de los protagonistas. Terrasa había conocido la historia del enterrador en 2013 como un personaje que aparecía «de refilón» en el recuerdo de Pepica Celda, la anciana que aquel año consiguió depositar los huesos de su padre, fusilado en 1940, junto a los de su madre. «Los arqueólogos me contaron cómo les había llamado la atención la aparición de esas botellas con los nombres de los fusilados, el orden con el que estaban depositados en la fosa común…».

Terrasa supo pronto que las historias de Pepica y Leoncio reunían los ingredientes perfectos para un cómic de Paco Roca. Pero cuando en 2021 ambos se reunieron con Maruja, la hija del enterrador, y esta les contó cómo era su padre, tuvieron claro que ya no había vuelta atrás para El abismo del olvido.

«A nivel narrativo, Leoncio era un regalo», explica Terrasa. «Nos encontramos con un hombre apasionado por la filosofía y la astronomía, que enseñaba a leer a la gente más pobre y que arriesgó su vida para que no se olvidara la de los demás».

Página de "El abismo del olvido" en la que aparecen Leoncio y Tomasín.

Página de "El abismo del olvido" en la que aparecen Leoncio y Tomasín. / Astiberri

Más allá del héroe

Pero a los autores les preocupaba que el recuerdo de Maruja estuviese demasiado idealizado y que el héroe fuese «demasiado perfecto». Durante la investigación, al mismo tiempo que se encontraban con hijas y viudas que se acercaban a Maruja para darle las gracias por los actos de su padre, también les llegaron los testimonios de familiares que aseguraban que el enterrador les cobraba 25 pesetas por dejarles adecentar a sus muertos.

«Eran testimonios difíciles de verificar, pero nos interesaba meter algún claroscuro en el relato», reconoce Terrasa. Por eso, los autores decidieron introducir un personaje de ficción, el del ayudante Tomasín, «para reflejar ese supuesto lado más oscuro de Leoncio que no hemos podido contrastar».

Aun así, aunque Leoncio quizá no fuera el héroe ideal, el periodista no duda de que su historia representa a la perfección a la gente que en aquellos tiempos inmorales «se jugo el pellejo para hacer las cosas decentes».  

El actor Pepe Zapata en "El enterrador"

El actor Pepe Zapata en "El enterrador" / L-EMV