«Grandes empresas han escogido la Comunitat Valenciana gracias a las EGM»

Trabajar codo con codo y dejar a un lado el individualismo para buscar el beneficio empresarial común. Así se podría resumir a grandes rasgos el foro de economía comarcal que el diario Levante-EMV y À Punt organizaron el pasado jueves en Alzira bajo el título 'Economía en la Ribera, más allá de la agricultura'. Esta comarca se ha convertido en los últimos años en un oasis de estabilidad y dinamización económica gracias, sobre todo, a su carácter resiliente para con los nuevos tiempos.

La cita reunió a cuatro actores relacionados con el tejido empresarial de la Ribera Alta. Así, entre todos concretaron cuáles son los desafíos a los que se enfrentan los polígonos industriales de este territorio a día de hoy. Siempre, sin olvidar el pasado, con la vista puesta en el futuro y los nuevos protagonistas que pronto formarán parte del panorama empresarial valenciano.

La mesa estuvo precedida por una pequeña intervención del alcalde de Alzira, Alfons Domínguez, quien recordó la «importancia de la colaboración público-privada» desde la sostenibilidad, y la necesidad de que «los sectores agrícola, industrial y de servicios» colaboren por un desarrollo económico global e innovador».

A modo de introducción, los cuatro invitados explicaron cual es la situación actual del tejido económico de esta comarca aparte de la agricultura. En este sentido, Miguel Ángel Calpe, presidente de la Entidad de Gestión y Modernización (EGM) del polígono de Cotes de Algemesí, dijo que «la industria ha supuesto un cambio radical para la comarca», sobre todo por su «tradición agrícola», y consideró que su futuro es «muy esperanzador». A continuación, y siguiendo la misma línea, Romina Moya, miembro de la Asociación de Empresarios de Parques y Polígonos Industriales de la Ribera Baja, señaló que, aunque «el campo es importante, la industria es la que da riqueza al territorio». De ahí que sea necesario «hallar un equilibrio» teniendo siempre en cuenta la sostenibilidad.

« Las EGM aportan a los polígonos las condiciones óptimas para ser competitivos»

Romina Moya

— Miembro de la Asociación de Empresarios Parques y Polígonos Industriales de la Ribera Baixa

Desde un punto de vista local, Carmen Herrero, directora de Iniciativa para el Desarrollo Económico de Alzira (IDEA), apuntó que «la agricultura es la que ha hecho que Alzira se haya convertido en una ciudad industrial», y recordó la gran importancia de la financiación europea para este territorio. Por su parte, Raúl Tudela, presidente de la Asociación Empresarial de Alzira, trató de exponer la fusión de pasado y presente. Para él, «la industria es la que históricamente ha generado una empleabilidad más técnica y especializada», pero tampoco le restó mérito a la agricultura. «Ha sido y sigue siendo fundamental» porque se ha sabido adaptar a los cambios tecnológicos con, por ejemplo, el uso de drones. Por eso, afirmó con convicción, «estamos en el camino correcto, pero hay que esforzarse para hacer más atractiva la comarca».

La importancia de las EGM

Tras esta primera aproximación, las reclamaciones de los empresarios hicieron acto de presencia en la mesa. Tudela destacó que «muchas empresas no pueden crecer por falta de personal cualificado» en el ámbito tecnológico. «Ese es el problema más grave», coincidió la directora de IDEA. Por eso, prosiguió, «hemos de tener las competencias que se demandan en el mercado laboral» y para ello «tenemos que trabajar con las empresas».

« Hemos de trabajar con las empresas para conocer las demandas del mercado laboral»

Carmen Herrero

— Directora de IDEA Alzira

Pero más allá de la formación, también se ha de tener en cuenta el escenario que la Ley de Áreas Industriales de la Comunitat Valenciana dibuja desde su aprobación en 2018. Su objetivo último es la modernización de los polígonos a través de nuevas figuras jurídicas que ayuden a implantar medidas para mejorar la competitividad de las empresas: las Entidades de Gestión y Modernización (EGM).

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«Antes nos costaba llegar a acuerdos», dijo Moya. Pero ahora contamos con las EGM, que ayudan a «aportar a los polígonos las condiciones óptimas para ser competitivos». Así, y teniendo en cuenta que «la comunicación es clave», señaló la importancia de que las empresas y los ayuntamientos hablen para «buscar puntos en común» y «sumar fuerzas».

La dificultad para el consenso

Sin embargo, esta unión no siempre es sencilla de alcanzar, un aspecto en el que quiso hacer hincapié Miguel Ángel Calpe. Si bien es cierto que, reconoció, en el caso del polígono Cotes de Algemesí, «fue relativamente fácil» lograr ese consenso porque los empresarios vieron que juntos «tenían más fuerza con una voz única», no fue así con el consistorio.

Criticó que, con esta norma, los técnicos –«que viven en un mundo paralelo»– «ponen muchas trabas hasta que ven que las propuestas son viables». E indicó que esto tiene una afectación muy amplia, pues «los polígonos suponen una inyección económica a varios pueblos». En este punto, la directora de IDEA Alzira salió en defensa de los profesionales de los ayuntamientos, y explicó que «un técnico pone dificultades porque debe adaptarse a la legislación vigente, que a veces es contradictoria».

Por su parte, la miembro de la Asociación de Empresarios de Parques y Polígonos Industriales de la Ribera Baja, entró también en el capítulo de las barreras para encontrar puntos en común concretando «los tres frenos» principales: «los ayuntamientos, la falta de profesionales y el individualismo de los empresarios».

« Los empresarios han de ver la unión, el apoyo y el asociacionismo como una necesidad»

Raúl Tudela

— Presidente de la Asociación Empresarial de Alzira

«Los empresarios, en el fondo, necesitamos estar en nuestro negocio», justificó Miguel Ángel Calpe. «Si no, perdemos el foco y todo se desestabiliza». Pero recordó que ahora «estamos en un sistema en el que lo bueno ha de serlo para todos». Por eso, «tenemos que pensar en la colaboración de las empresas de varios pueblos porque así se consiguen resultados». Y ahí es donde radica la relevancia de las EGM en las áreas industriales. De hecho, remató, «son uno de los motivos por los que grandes empresas –como la futura gigafactoría de Volkswagen en Sagunt– hayan querido venir a la Comunitat».

Pero para que las compañías decidan asentarse en nuestro territorio, no solo son necesarios los EGM, sino también «las políticas –tanto nacionales como europeas– y la financiación para que los ayuntamientos puedan hacer inversiones», indicó Tudela. Y concluyó: «Los empresarios han de ver la necesidad de la unión, el apoyo y el asociacionismo».

Por último, Silvia Tomás, directora de Relaciones Institucionales de Prensa Ibérica en Valencia y moderadora de la mesa, agradeció a los cuatro ponentes su participación, así como al alcalde de Alzira, Alfons Domínguez, por haber facilitado la Casa de la Cultura de la localidad para celebrarla.