El chocolate con churros y los buñuelos se reinventan en una pastelería de València

Con la ciudad envuelta en las Fallas de 2024, el chocolate con churros y los buñuelos ya han conquistado las calles valencianas. Sin embargo, más allá de la versión más clásica y reputada de estos dulces típicos de estas fechas, una pastelería en pleno centro ha revolucionado las recetas tradicionales.

Pepina Pastel, con una de sus tiendas en el barrio de Russafa, ha vuelto a lanzar la versión renovada del chocolate con churros, la Pepichurros, y suma este año una nueva revisión de la cultura gastronómica: el Pepibunyol .

Este último ha supuesto toda una revisión de la tradicional receta valenciana hecha de calabaza. Está elaborado con una ganache montada de calabaza y cremoso de chocolate en su interior, mientras que la cobertura es de chocolate y azúcar. Su textura interior es cremosa y es una explosión de sabor que respeta la tradición 'bunyolera' valenciana.

Mientras, la tarta Pepichurros está elaborada con chocolate a la taza de la marca Valor y trocitos de churros, con su textura cremosa como un coulant que mezcla la merienda tradicional fallera.

Dónde adquirirlas

Ambos dulces pueden adquirirse de forma separada o junta en las tiendas de Russafa, en la calle Conssolat del Mar, o en su sede de Alzira. El precio de la tarta Pepichurros es de 28,50 euros, y por 30 se puede llevar con un Pepibunyol. También existe la opción de cuatro buñuelos por 23 euros en un pack de 4.

Son productos que solo se encuentran a la venta durante esta temporada fallera, como en el resto de comercios que durante las fiestas josefinas se vuelcan con la tradición gastronómica valenciana. Estarán disponibles hasta el 19 de marzo y pueden adquirise online.