Orriols tiene motivos para creer

El Levante UD ganó siete meses después fuera de casa ante el Villarreal B y ya mira de fondo al Eibar para conseguir dos victorias seguidas en LaLiga, algo que no logra desde el pasado octubre

Los futbolistas del Levante UD celebran uno de sus tres goles en El Madrigal, el pasado sábado.  | MANOLO NEBOT

Los futbolistas del Levante UD celebran uno de sus tres goles en El Madrigal, el pasado sábado. | MANOLO NEBOT / pablo leiva. valència

Pablo Leiva

El levantinismo afrontó el sábado y afronta ahora el domingo pendiente de otros resultados y tirando de calculadora, pero la mejor noticia es que el trabajo ya estaba hecho. El triunfo contra el Villarreal rescató la primera sonrisa en un partido a domicilio desde el 6 de octubre. Sí, desde el 6 de octubre. Siete meses han pasado desde aquella victoria contra el Alcorcón que inició una buena racha de cuatro victorias y tres empates donde el cuadro granota parecía mostrarse como candidato incluso al ascenso directo. Pero todo eso se desvaneció por el camino, tanto que con Calleja primero y luego con Miñambres no había sido capaz de ganar como visitante tantos partidos que sorprende que todavía estuviera vivo el sueño de la promoción. A pesar de eso, el Ciutat nunca bajó los brazos -y eso que había motivos- y esta semana llenó todo su fondo en La Cerámica para arropar al cuadro dirigido por Pedro López, que disfrutó en su primer día.

El Levante tenía que ganar y lo hizo y ahora mira de fondo a un Eibar que es uno de los ‘cocos’ del curso. En estos momentos el c uadro armero es tercero pero todavía tiene que jugar hoy y, a pesar de que es uno de los mejores equipos del curso, a la espera de su partido el cuadro granota está a solo seis puntos de ellos. En definitiva, todo está abierto pero el principal problema, más allá de todas las alegrías es la inconsistencia de un equipo que debe sí o sí mostrar mayor regularidad. Cabe recordar que el cuadro granota no suma dos victorias consecutivas desde el 21 de octubre. Son demasiados meses para que un equipo que quiere ascender, como mínimo vía promoción, siga en esa pelea por los puestos de la zona alta. Por eso hay que insistir en que el triunfo contra el Villarreal es positivo pero no vale de nada si se vuelven a cometer los mismos errores que se han llevado cometiendo en los últimos meses.

El levantinismo tiene en el defensa a uno de sus mejores nombres y además a uno de los pesos pesados del vestuario. Su gol fue de ‘killer’ y así lo explicó tras el encuentro. «He tenido intuición, siempre hay que estar ahí, en los rechaces y segundas jugadas. Estoy contento por el gol, y porque ha ayudado para los tres puntos. Llevábamos dos varapalos en casa y nos merecíamos esta victoria», aseguró el futbolista, quien también habló sobre el resto de rivales. «En el fondo sabíamos que no podíamos fallar. Una derrota hoy nos hubiera dejado muy alejados. Entiendo que alguno de arriba ganará. Ahora metemos presión nosotros. Hemos hecho un gran partido y nos puede dar confianza de aquí al final», aseguró. A pesar de eso podría haber una mala noticia con su estado físico, algo que explicó Miñambres tras el choque. «No tengo esperanza de que sea poco, mi impresión es que no vamos a poder contar con él. Dice que tiene algo pequeño y yo he tenido lesiones de cuádriceps y son fastidiadas», dijo el entrenador del Levante a la conclusión del encuentro», sentenció Miñambres en la rueda de prensa posterior al triunfo en La Cerámica ante el filial amarillo.