El kayak se dispara en Xàbia: 22 empresas operaran este verano en la Granadella y la Barraca

Las firmas eran 9 hace dos años. Deben cumplir turnos y horarios para evitar saturar En Caló o las cuevas dels Òrguens y el Llop Marí

Kayaks en una pequeña cala del litoral del Tangó de Xàbia

Kayaks en una pequeña cala del litoral del Tangó de Xàbia / A. P. F.

A. P. F.

El turismo activo está muy activo. Ha crecido exponencialmente en Xàbia en los últimos años. Las calas y la costa de acantilados son un "parque de atracciones" para los turistas que quieren hacer mil peripecias.

Los kayaks van a más. En 2021, de hecho, el ayuntamiento puso en marcha una regulación para evitar que piraguas y tablas de paddle surf invadieran calas como la de En Caló o las cuevas marinas dels Òrguens y el Llop Marí. Empezaban a formarse atascos en el mar. Ese primer año de regulación fueron 9 las empresas de turismo activo que se inscribieron para participar en un sistema de regulación que establece horarios y turnos para las salidas de las excursiones a remo.

Kayaks y tablas en la cala de En Caló

Kayaks y tablas en la cala de En Caló / A. P. F.

El pasado año las empresas ya subieron a 17. Este verano serán 22 las firmas que operarán en la Granadella y el Portitxol o Barraca, las dos calas de las que zarpan las excursiones en kayak o en tabla.

El concejal se ha reunido esta mañana con los responsables de las empresas de turismo activo

El concejal se ha reunido esta mañana con los responsables de las empresas de turismo activo / Levante-EMV

El concejal de Playas y Medio Ambiente, Toni Miragall, se ha reunido esta mañana con las empresas de alquiler de kayaks, tablas o similares para establecer los turnos y horarios de las excursiones de este verano. El edil les ha explicado que esta regulación busca "un equilibrio y buena convivencia entre esta creciente oferta de turismo activo y los bañistas de las calas".

La agreste costa de Xàbia se ha convertido en la "Meca" del turismo activo. Y ocurre lo de siempre. Efecto llamada y peligro de masificación. Las calas y las cuevas son espacios naturales frágiles.

La mayor parte de los responsables de las empresas de turismo activo están concienciados y saben que sobrecargar estos lugares al final perjudica a todos. Aceptan la regulación y consideran que lo mejor es hacer un uso ordenado y sostenible de un tramo de costa al que no le sienta nada bien la saturación.