"Recordar aquellas Fogueres de Xàbia, las primeras de hace 75 años, es muy bonito"

María Espasa Moragues fue dama de honor en las primeras fiestas de Sant Joan: «Hicimos muchas rifas y teatro para poder pagar los actos»

María, en la imagen con los álbumes de fotografías y la banda de las primeras Fogures, cumplirá en agosto 93 años

María, en la imagen con los álbumes de fotografías y la banda de las primeras Fogures, cumplirá en agosto 93 años / A. P. F.

Alfons Padilla

Alfons Padilla

María Espasa Moragues sonríe. Se le iluminan los ojos. Los recuerdos la hacen feliz. «Vivimos aquellas primeras Fogueres con muchísima ilusión. En los primeros pasacalles, nuestras madres salían al portal de las casas y, al vernos, lloraban de la emoción».

Les Fogueres de Xàbia conmemorarán en junio sus 75 años. María fue dama de honor en aquellas primeras fiestas de Sant Joan de 1949. Recuerda perfectamente que la reina fue María Teresa Calzada Rubio y la reina infantil Gertrudis Tena. «Todas éramos amigas y nos queríamos mucho. No sabíamos qué era la envidia».

«Recordar aquellas primeras fiestas es muy bonito», afirma María. Se nota que rememorar la hace feliz. En 1999, cuando se celebró el 50 aniversario de las fiestas, ella volvió a desfilar con el traje de entonces, que afirma que estaba repujado de «pequeñas perlas», y lució la banda de dama de honor. La banda la muestra hoy con orgullo. En les Fogueres del cincuentenario, se editó un libro que recuperaba muchas fotos históricas. María demostró su gran memoria y apuntó, concienzudamente, los nombres de las personas que aparecían en esas imágenes. Ella ha contribuido de forma muy importante a sacar de la bruma la memoria de las fiestas.

En la edición de los 50 años volvió a vestirse de dama de honor.

En la edición de los 50 años volvió a vestirse de dama de honor. / L-Emv

María asegura que les Fogueres han cambiado muchísimo. «Nosotras hicimos muchas rifas y representaciones de teatro para reunir dinero y poder pagar los actos». Ella era una trabajadora incansable. Tenía una peluquería en el Carrer dels Cups, en pleno centro histórico. «Me gustaba mucho la peluquería y se me pasaban las horas sin que me diese cuenta».

Recuerda perfectamente aquella sprimeras Fogueres.

Recuerda perfectamente aquella sprimeras Fogueres. / L-EMV

Su madre, Rosario, era modista. «Nos ayudó mucho. Era una mujer que no le tenía miedo a nada», indica María, que recuerda también que su madre hizo los vestidos de los «ninots» de aquella primera Foguera.

Recuerdos que son un tesoro

En 1999, al reencontrarse con las damas y las reinas, revivió las emociones de la juventud y de aquellas primeras fiestas. María mira las fotos y sonríe. Ella fue pionera de estas fiestas. Esos recuerdos que a ella la hacen tan feliz son un tesoro.