El brillante ascenso del Atlético Saguntino a la Segunda División B va a obligar a la directiva del club y al Ayuntamiento de Sagunt a realizar un esfuerzo titánico para que los rojillos cumplan con los requisitos exigidos para participar en la categoría de bronce del fútbol español.
Nada más lograr el ascenso en Calahorra, el presidente del Saguntino, Juan Manuel Domingo, apeló al consistorio saguntino y más concretamente a la alcaldía para que posibilitara que el club consiga «un espónsor fuerte». Pues bien, desde el consistorio saguntino ya se empiezan a barajar cifras y posibilidades de cara a que el ascenso deportivo cristalice en los despachos.
Por lo pronto, para que los rojillos puedan hacer frente a los gastos mínimos que se prevé tener en la Segunda B, deberán presentar un presupuesto de no menos de 500.000 euros. Esta cifra se desglosa en unos gastos de cerca de 240.000 euros en sueldos y otros tantos mil euros en cánones, arbitrajes y desplazamientos. Y es que Segunda B es una división semiprofesional, donde la normativa de la competición exige que al menos siete jugadores de la plantilla ostenten un contrato profesional. Si los rojillos consiguieran ese medio millón de euros de presupuesto, cifra muy superior al actual, que ronda los 200.000 euros, estaría en disposición de jugar aunque, eso sí, con uno de los presupuestos más bajos de la categoría.
Desde el Ayuntamiento de Sagunt están decididos a ayudar al Atlético Saguntino en todo lo que puedan, algo que ya hicieron tanto con el BM Puerto Sagunto cuando ascendió a Asobal, como con el equipo femenino de balonmano que llegó a proclamarse campeón de la liga española. En estos momentos, la subvención anual que el consistorio ingresa en las arcas rojillas asciende a 40.000 euros, una cifra muy alejada de las necesidades que deberían cubrir los saguntinistas la próxima temporada. En cuanto a la cantidad a la que estaría dispuesto a llegar el ayuntamiento, desde el área de Deportes señalan que «es pronto para decir nada, todo dependerá de los próximos presupuestos».
Apoyo institucional
A la espera de conocer en qué medida podrá el consistorio realizar una aportación económica directa, la tabla de salvación del Saguntino para lograr el ascenso definitivamente es encontrar el ya mencionado «espónsor fuerte». En esta cuestión, el ayuntamiento pondrá la mejor de las intenciones, pero deberá ser el Saguntino quien tome la voz cantante. «Nosotros les acompañaremos en todas las negociaciones, iremos de la mano del club para hablar con los patrocinadores para que estos vean que hay un apoyo institucional al proyecto. Hay que pedir colaboración a las empresas locales fuertes, que ya están patrocinando a los clubes, pero en cantidades muy pequeñas», indican desde el consistorio saguntino.
El ejemplo a seguir por el Atlético Saguntino lo está marcando en los últimos años el Fertiberia BM Puerto, equipo que ha logrado un patrocinio por cuatro años que garantiza económicamente el mínimo exigible para cumplir los requisitos de Asobal. Lograr un importante contrato de esponsorización por una duración mínima de 2 ó 3 años será la única manera de que el Saguntino sea viable en la Segunda División B.
