Un pequeño tornado deja daños materiales en Benavites

El Camp de Morvedre hace balance de los daños provocados por el último temporal. Los principales perjudicados por el viento, el granizo y la lluvia fueron los árboles, como el conocido como el pino de la República en el acceso a Albalat dels Tarongers, que no pudo soportar las intensas ráfagas. Estivella fue otro de los puntos donde la borrasca descargó con principal virulencia, aunque los efectos más dañinos se registraron en les Valls.

Concretamente en Benavites, varios vecinos confirmaron que se formó un pequeño tornado que se llevó el tejado y las paredes de una nave que se encuentra en uno de los accesos al municipio. El viento también fue el responsable del derribo de un depósito que cayó encima de un vehículo, al que destrozó el parabrisas delantero. Además, en la vecina Quartell, un árbol obligó a cerrar la carretera al quedarse cruzado sobre la vía, aunque los operarios no tardaron en dejar la zona despejada.

Agricultura

Estos daños también se ampliaron a los cultivos, donde el Camp de Morvedre fue uno de los afectados tanto en campos de naranjas como de caquis. Para los agricultores más afectados, los colectivos de este sector han reclamado que las administraciones autonómica y nacional tomen cartas en el asunto y despliegue una batería de ayudas con la finalidad de paliar los desperfectos causados".

Vientos de 98,2 kilómetros por hora

Por lo que respecta a los registros meteorológicos de esta última tormenta, las mayores lluvias tuvieron lugar en Benavites con algo más de 27,1 litros por metro cuadrado, mientras que los vientos más fuertes fueron en Quartell, donde las rachas alcanzaron los 98,2 kilómetros por hora, según la información recopilada por l’Associació Valenciana de Meteorologia.