MotoGP

Pedro Acosta: "La suerte se busca y yo la busco cada día"

“Lo más fácil en la vida es copiar y yendo detrás de los buenos pilotos se aprende mucho”, asegura el rookie revelación de MotoGP en vísperas del GP de Catalunya

“Si estoy dónde estoy es gracias a la apuesta de mi padre y mi abuelo, que se hipotecaron el barco y lo arriesgaron todo por mí”, subraya

Pedro Acosta, en la rueda de prensa del GP de Catalunya.

Pedro Acosta, en la rueda de prensa del GP de Catalunya. / EFE

Laura López Albiac

Pedro Acosta ha revolucionado el Mundial en su primera temporada en la categoría reina. Campeón de Moto3 y Moto2, el ‘Tiburón’ de Mazarrón ha irrumpido en la parrilla a golpe de talento y sin complejos, sumando tres podios en su debut. Llega al GP de Catalunya tras sufrir su primera caída en carrera, en Francia, un jarro de agua fría que, sin embargo, no rebaja sus expectativas. Quiere ganar y está convencido de que lo conseguirá más pronto que tarde. Si lo logra antes del GP de Alemania (7 de julio) batirá el récord absoluto de precocidad en poder de Márquez, con 20 años y 63 días. Pedro cumple los 20 este sábado 25 de mayo.

Su espectacular arranque de temporada le ha puesto en el foco de atención. ¿Cómo lo lleva?

Todavía no estamos en el punto en el que queremos estar, al nivel que buscamos, así que queda mucho para que pueda significar algo.

¿Le pone presión extra?

Estoy acostumbrado a la presión, desde que entré en el Mundial siempre ha sido así. El primer año por lo que pasó, por el título de Moto3, el segundo, por lo mal que empecé en Moto2, el tercero, por saber dónde iba a correr en MotoGP y este año por lo bien que está yendo… llevo cuatro años viviendo con esa presión constante. Te acostumbras o mueres.

¿Cuál es el secreto de su rápida adaptación a MotoGP?

Pues, simplemente que me lo paso bien montando en moto y tengo a mi alrededor el mejor equipo posible, KTM ha hecho una elección acertada de las personas que me acompañan en este primer año.

[Consulta la clasificación del Mundial de MotoGP]

¿Ha cambiado su preparación física específica para la categoría?

Después del primer test en Valencia me centré en aumentar la espalda porque veía que los otros pilotos eran más anchos de hombros y más definidos que yo. Solo eso. No me ha dado ningún problema de síndrome compartimental ni nada. He cogido dos kilos y eso ayuda a que se me vea un poco más grande.

Aunque parezca que su carrera deportiva es un camino de rosas, no siempre lo ha tenido fácil…

Sobre todo los primeros pasos. La gente solo recuerda al Pedro Acosta que ganó la Rookies Cup y seis carreras del tirón, llegó al Mundial y también ganó y venga, el salto a la fama… pero no ha sido tan simple. En el CEV había gente muy fuerte, como Raúl Fernández, Alcoba, Sergio García… un nivelazo, nosotros no hicimos las elecciones correctas por factores externos y hubo un momento en el que la luz se apagó bastante. Nos vimos sin equipo, sin saber dónde íbamos a correr y me acuerdo que los papeles de inscripción de la Rookies Cup los eché el último día. Estuve a punto de quedarme en casa. 

Su familia se hipotecó para que siguiera adelante con su sueño…

Hipotecaron el barco, apostaron por mí sin miedo a perderlo todo. Se arriesgaron, porque ya te digo yo que sin barco, mi padre y mi abuelo se mueren. Gracias a Dios salió bien y ahora si soy quien soy y estoy aquí es gracias a esa apuesta y a ese barco.

Una vez superados todos los obstáculos ¿siempre ha tenido claro que llegaría al top?

Siempre he confiado en mis expectativas y entrenar tanto me ha obligado a creérmelas. La suerte se busca y yo intento buscármela cada día.

¿Se aprende mucho siguiendo en pista a las estrellas del campeonato?

Lo más fácil en la vida es copiar y yendo detrás de los buenos pilotos aprendes, te da bastante información de lo que hacen con el cuerpo, porque ahora en MotoGP, con tanta electrónica, es difícil diferenciar cuando tracciona la moto, si es por la moto o por el piloto. Me fijo en sus movimientos para ver cómo puedo pasarlo a mi estilo.

¿De su primer año en Moto2, que le costó bastante, que ha aprendido que le sirva ahora en su estreno en MotoGP?

A tomarme las cosas con calma. Después de ganar en Moto3 quise quemar etapas demasiado rápido y creo que por eso ahora estoy haciendo un mejor primer año en MotoGP.

¿Ve cerca su primera victoria?

Me gusta ganar y soy el primero que quiero lograrlo, pero creo que se necesita tiempo y hacer las cosas bien para que llegue esa primera victoria.

¿Le motiva batir el récord de Márquez y ser el vencedor más joven de la historia en MotoGP?

No es mi objetivo, ni es ninguna prioridad ahora mismo.

¿Le molesta que le comparen constantemente con Marc?

Bueno, es un referente de la categoría. Que te comparen con él siempre es bueno.

Otros, como su manager Albert Valera, le comparan más con Lorenzo, que dice siempre lo que piensa…

Creo que de carácter somos bastante parecidos, de personalidad fuerte. Albert nos conoce a los dos bien y sabe de lo que habla. Yo no conocía a Jorge y me he dado cuenta de que sí tenemos mucho en común.

¿Cómo es su relación con Dani Pedrosa y hasta qué punto ha sido importante para usted su trabajo como probador de KTM?

Dani es lo que se dice el Racing Corona. Es una pena que por todas las cosas que le han pasado no haya conseguido ningún título de MotoGP, porque se merecía no uno, sino uno cada año que ha corrido. Su ayuda está siendo fundamental. Si Dani hace una moto para él, hace una moto más fácil para los demás, por sus carencias físicas, por lo pequeño que es, lo hace más fácil para los que somos de mayor envergadura. 

¿Qué cosas le ayudan a mantener los pies en el suelo en pleno boom Acosta?

Cada domingo vuelvo a casa, a Murcia y veo gente que se juega la vida pescando por traer un plato de comida a casa. Eso es lo más humilde del mundo y en lo que se basa mi vida.

¿Se ha planteado mudarse de Mazarrón?

No, para nada. Me quedo allí tan contento.

¿La fama cómo se lleva en un pueblo tan pequeño?

Allí nos conocemos todos y es la gente de siempre. Me conocen desde que nací y para ellos no soy Pedro Acosta el piloto, soy el niño que vive allí. Yo voy por el pueblo y la gente me saluda, pero hago mi vida, tranquilamente.

Su vida son las motos. Al margen de eso ¿tiene alguna afición?

Pocas, pocas, y la verdad es que me gustaría tener más, pero si en 20 años no ha cambiado, creo que ya no hay remedio.

¿Siente que se ha perdido algo respecto a los chicos de su edad?, fiestas, discotecas…

No, como no lo he vivido no lo echo de menos. En mente ocupada no hay tiempo para pensar y yo soy feliz con lo que hago.

¿Tiene amigos en la parrilla?

Pocos. Con Jorge Martín ha ido creciendo la relación en los últimos años, cuando nuestros mundos se han juntado un poco, con Aleix Espargaró, lo mismo. El único amigo de verdad que yo tenía aquí era Remy Gardner y ya no está. Y luego con Alex Escrig nos conocemos desde los tiempos de la Rookies Cup… así que pocos, pero suficientes.

Ha sido crítico con el nuevo reglamento de 2027…

No tanto. Podía haber sido más crítico… creo que si hacemos un cambio, que no sea un cambio a medias, lo digo como lo siento.

¿Cuál sería su propuesta?

Quitaría más alerones, para tener motos como las de toda la vida. Respeto el cambio de cilindrada y que se hayan quitado todos los dispositivos de salida. Pero me habría gustado que quitaran más aerodinámica porque es lo que hace que las MotoGP actuales sean tan rápidas. Nosotros a final de recta, por muy rápido que vayamos. no nos caemos. El problema son las curvas, los circuitos se quedan pequeños y el muro cada vez está más cerca.

¿Con qué resultado se dará por satisfecho a final de temporada? 

Cualquiera, siempre que sea dando los pasos que tenemos que dar. No nos marcamos objetivos, ni resultados concretos, solo mejorar, que es lo que el año que viene puede llevarme a luchar por algo importante.