Opinión

Guardias médicas y 35 horas: más solución que problema

La reciente promesa de la ministra de Sanidad de reducir la jornada de guardia del personal sanitario a 17 horas así como la reivindicación por parte de las organizaciones sindicales a las Conselleria de Sanidad de implantar las 35 horas semanales en la Comunidad Valencia son dos asuntos que han generado controversia en la opinión pública.

En ambo casos, han salido en tromba consejeros de distintas comunidades y dirigentes políticos para asegurar que ambos propósitos, podríamos incluso hablar de hitos, no son posibles ya que esto produciría un inmediato desabastecimiento sanitario y comprometería la asistencia sanitaria de la población. Desde mi punto de vista, como médico en activo en la sanidad pública valenciana, considero que son argumentos con buena dosis de demagogia y, sobre todo, ciegos a la situación diaria que sufren estos profesionales. ¿Debemos seguir maltratando y atropellando los derechos del personal médico, obligándolo a realizar mas de 60 horas semanales para garantizar la asistencia a la ciudadanía?

La afirmación de que sólo con jornadas y guardias interminables podemos hacer frente a la demanda sanitaria sólo sería verídica si estuviésemos en un sistema estanco, aquel en que no dignificar las condiciones de jornada y guardias y no permitir la conciliación de la vida personal y familiar de nuestros médicos y médicas, fuera factible porque ese mismo personal fuera infinito. Es decir, simplemente (y eso ya es grave), pudiéramos seguir disfrutando de su trabajo solo a costa de su salud y dignidad.

Pero el problema, más allá de la evidente falta de ética que supone cerrar los ojos de la realidad laboral de este personal, es que los médicos y las médicas actuales se van. Profesionales bien formados, con idiomas, actualizados y referentes en muchos campos se marchan a Europa o a otros centros de trabajo donde se les trata mejor y se les respeta. A lugares en los que no cubren guardias de 24 hora ni semanas extensas porque, sencillamente, no se dan.

Solo tres de cada diez especialistas que se forman en la Comunitat Valenciana se queda en ella tras la residencia. Ante este dato no importa cuantas plazas MIR nos conceda el ministerio porque terminaran la formación y se irán. Desde el sindicato médico de UGT Serveis Públics pedimos a las autoridades sanitarias dignidad; que valoren nuestro trabajo. Sólo con unas condiciones dignas tanto retributivas como de carga de trabajo que nos permitan conciliar, tendremos médicos y médicas y, por su puesto, una asistencia sanitaria en condiciones óptimas. En caso contrario, solo habrá consultorios y urgencias vacíos o llenos de profesionales lastrados por el cansancio y el estrés, que poco podrán aportar. Las 35 horas semanales y un sistema de guardias justo son, se mire por donde se mire, mas solución que problema. Es el momento y hemos de ser valientes. La ciudadanía lo agradecerá.