José Luis López, propietario del Trinquet de Pelayo, presidente de honor de la Federación de Pelota Valenciana y de la Confederación Internacional comunicaba el pasado viernes a la secretaría de la Fundación de Pilota Valenciana su dimisión como miembro de la comisión ejecutiva de la misma. Oficialmente habla de razones de «incomodidad». El empresario y mecenas fue en su día uno de los promotores de la Fundación cuando la empresa Val Net entró en crisis definitiva. La Fundación dirige el mundo profesional de este deporte en las modalidades de Escala i Corda y de Raspall. Sin embargo el propio José Luis López anuncia que seguirá como patrono de la misma, colaborando económicamente a su sostenimiento. Desde la Fundación confían en que el dueño del Trinquet de Pelayo reconsidere su decisión «en aras a la unidad que merece este deporte para su desarrollo y expansión».

La dimisión de José Luis López que según sus palabras «se siente desanimado», podría afectar a la intención de la propia Fundación en dinamizar las actividades culturales en Pelayo, un proyecto que contaría con el apoyo económico de la Generalitat Valenciana y que pasaría por el alquiler del recinto a la propia Fundación. Negociaciones que estuvieron a punto de cerrarse hace unos días y que ahora podrían paralizarse con esta dimisión.