La Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo acordó ayer mantener abierta la queja elevada por el exalcalde de Real Alejandro Blasco, que reclamaba la restauración ambiental y sellado de las zonas degradadas de los antiguos vertederos ubicados en el término municipal, hasta constatar que se ha completado su rehabilitación. El Parlamento Europeo se dirigirá a la Generalitat Valenciana para solicitar que realice un seguimiento y facilite a la cámara información sobre el proceso de «rehabilitación, cierre y limpieza». José Diaz del Castillo, en representación de la Comisión Europea, introdujo el debate repasando la respuesta que la Administración autonómica ofreció en octubre al trasladarle la queja recibida. En ella, la dirección general de Calidad Ambiental señalaba que el vertedero de residuos urbanos que gestionaba la Sociedad Agricultores de la Vega (SAV) se encuentra «sellado y clausurado» mientras que, en el caso del vertedero de residuos tóxicos y peligrosos, la restauración continúa pendiente.
La eurodiputada socialista Inmaculada Rodríguez-Piñeiro dijo compartir la preocupación de los vecinos de Real que, según dijo, vienen reclamando desde hace más de una década la regeneración de esta zona. «Creemos que ha pasado el tiempo y urge una solución», indicó, antes de lanzar una puya al firmante de la queja. «Lo que nos parece inaudito es que la persona que realiza la petición ha sido alcalde de este municipio durante muchos años y ha sido quien precisamente ha dificultado que se pudieran hacer las actuaciones», señaló.
Rodríguez-Piñeiro también se refirió en este punto al apartado del informe de la conselleria que detalla que el Servicio de Inspección Medioambiental pidió en el año 2012 al ayuntamiento información sobre la clausura del vertedero de residuos sólidos en base a lo que establecía la licencia, «sin haber recibido ninguna respuesta», apostilló, mientras que, en el caso de la planta de residuos peligrosos que gestionaba la empresa Valenciana de Eliminación de Residuos (VER), indicó que «nos parece chocante que durante los años 2006 y 2007 el municipio denegó las licencias de obras para el sellado del vertedero de tóxicos y el propietario informó de que no podía haber hecho ninguna actuación por la negativa del ayuntamiento», extremo que recoge la respuesta de la Generalitat y que el exalcalde de Real niega.
La preocupación se mantiene
La eurodiputada incidió en que persiste la preocupación por los problemas de calidad ambiental y contaminación que puedan generar el estado de estos vertederos -en 1997 el ayuntamiento clausuró el de residuos urbanos y en 2003 el de tóxicos- por lo que valoró como «fundamental» que los actores involucrados, en este caso ayuntamiento y empresa gestora, «realicen las acciones oportunas». Rodríguez-Piñeiro comentó que al ayuntamiento ya había concedido licencia para el sellado del vertedero de tóxicos -el actual alcalde de Real, Antonio Hernándiz, aclaró ayer que la empresa ha presentado el proyecto, aunque no dispone aún de licencia, como él mismo había anunciado el día anterior- y también ha firmado convenios para la regeneración. Cabe recordar que, según Hernándiz, el proyecto estima en 700.000 euros el coste de la regeneración.
No obstante, la eurodiputada propuso que la petición se mantuviera abierta «hasta que tengamos constancia de que todo se ha ejecutado». El Grupo Popular Europeo expuso que la comisión no disponía de suficiente información para tomar ayer una decisión por lo que coincidió en señalar que la petición debía mantenerse abierta.
El firmante de la queja, Alejandro Blasco, manifestó ayer que la eurodiputada socialista «miente» ya que, según incidió, durante su etapa como alcalde nunca se presentó un proyecto de restauración del vertedero, por lo que el ayuntamiento no ha podido denegar ninguna licencia. Blasco indicó que el ayuntamiento solo expresó de forma verbal su negativa a que la empresa rellenara los vasos con escombros. El exalcalde incidió en que, a pesar de sus múltiples solicitudes, nunca hubo un proyecto sobre la mesa -«por eso recurrimos al Parlamento Europeo», dijo- y defendió que este hecho es el que ha precipitado la presentación la semana pasada del proyecto de restauración del vertedero de tóxicos. Blasco señaló que, no obstante, no se puede circunscribir el debate a esta instalación ya que se trata de zona degradada muy amplia.
