Las plantas fotovoltaicas previstas en la Ribera ocuparían cientos de hectáreas

Más de 2.000 hectáreas de suelo se verán afectadas si finalmente la Administración, ya sea la Generalitat o el Gobierno central en función de la potencia de cada proyecto, autorizan las siete megaplantas fotovoltaicas que hay actualmente en tramitación en la Ribera Alta, según los datos recopilados por la Coordinadora Valenciana por la Ubicación Racional de las Energías Renovables en el territorio, promotora de la protesta celebrada el sábado en València con el lema «Energías sí, pero no así», para reclamar un modelo en la implantación de las fotovoltaicas que tenga en cuenta el impacto sobre el medio ambiente y sea respetuoso con el territorio y las personas.

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El inventario realizado por la coordinadora en base a la información que ofrece el visor cartográfico de la Generalitat y la superficie de las parcelas catastrales afectadas enumera una docena de proyectos de plantas fotovoltaicas en la comarca, si bien siete sobresalen por su envergadura, tanto por la potencia prevista como por la superficie que necesitan para la instalación. La extensión que estima la coordinadora no coincide en algunos casos con las que reconocen las empresas promotoras y algunas fuentes señalan que ese desajuste puede ser producto de utilizar como referencia la superficie de las parcelas afectadas, ya que las plantas no necesariamente las ocuparán íntegramente, mientras que otras señalan que en el proceso de tramitación las propias empresas han reducido algunos proyectos para salvar obstáculos.

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Los proyectos de fotovoltaicas de mayor envergadura que se están tramitando en la Ribera Alta se localizan en Turís y Alborache, ya que en el caso de las megaplantas denominadas Los Predios y los Hierros ocupan suelo en varias localidades; en Carcaixent, Tous, Sumacàrcer, Catadau y Alzira y Llombai.

Según los datos que utiliza la coordinadora, los proyectos denominados Los Predios y Los Hierros ocuparían una superficie de 520 hectáreas en el primer caso de 195 en el segundo, si bien la empresa promotora reduce esa extensión total a 466 hectáreas y ha defendido públicamente que solo el 19 % de esa extensión, 88,4 hectáreas entre los dos proyectos, se destinarían a la colocación de paneles solares mientras que el resto del terreno se define como zonas de compensación y conservación del medio natural.

Otro de los mayores proyectos es el que se localiza en Carcaixent con la denominación de Campos Salados. Fuentes de la coordinadora expresan su extrañeza por la escasa información sobre este expediente a pesar que se que se trata de uno de los más antiguos y que, según indican varias fuentes, se ha modificado para evitar ocupar terrenos afectados por el incendio de 2016. En este caso, la recopilación de la coordinadora basadas en la superficie de las parcelas afectadas eleva la superficie a 516 hectáreas, mientras que otras fuentes reducen esta extensión a cerca de un centenar.

Un grupo de agricultores de Sumacàrcer participó el sábado en la protesta con pancartas que aludían que la megacentral que se proyecta en el sector conocido como l’Alt, y que abarca terreno también en Navarrés, obligaría a arrancar 28.000 olivos. En este caso, la coordinadora estima en torno a 250 hectáreas la superficie afectada. Las otras megacentrales en tramitación se localizan en Tous y Llombai y otra algo más reducida se implantaría entre los términos de Alzira y Catadau, donde el Gobierno ya descartó el proyecto de otra gran planta. En Alginet, Benifaió o Montserrat también se tramitan otros proyectos mucho más modestos.

Si bien hay otras comarcas con proyectos que abarcan superficies mayores, la Ribera Alta es una de las que presenta mayor concentración de centrales. Fuentes de la Coordinadora por la Ubicación Racional de las Energías Renovables inciden en el contraste que representa la proliferación de proyectos en esta comarca en comparación con otras vecinas como la Ribera Baixa o la Safor.

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