El mejor acróbata del mundo con las pizzas es de Alginet

Francis Tolu logra en Parma el campeonato de la especialidad y se convierte en el único profesional con cuatro títulos mundiales

El mejor acróbata del mundo con las pizzas es de Alginet

Óscar García

El pizzero de Alginet Francis Tolu Botella se ha alzado en Parma (Italia) con su cuarto título del mundo en la modalidad de pizza acrobática o pizza «freestyle» con un espectáculo muy emotivo en el que combinó la poesía con los malabarismos propios de la prueba para rendir homenaje a todos los campeones del mundo de esta especialidad, que le sirvió como despedida ya que, según ha confirmado a Levante-EMV, tras 25 años de acrobacias con la pizza ha decidido abandonar la competición y dejar paso a la gente joven. Se trata del único pizzero que suma cuatro títulos del mundo.

«Competir en la élite es lo más», señala Fracis Tolu, que logró este hito a pesar de que el sorteo le fue desfavorable al torcarle actuar el primero en la fase final. «Nunca había ganado nadie que había salido el primero», destaca. El tetracampeón del mundo formaba parte de la selección española, la «Roja de la Pizza», y acudía a Parma tras un duro trabajo previo tanto en la preparación del poema que se recitó como en ensayar los movimientos de todos los campeones del mundo para reproducirlos en el espectáculo, lo que le llevó por momentos a «jugar» con tres masas de pizza a la vez. «Los jueces lo han valorado, el espectáculo fue muy emotivo y hasta el presentador lloró. Ese plus creo que es el que me dio la victoria», comenta.

Seis finalistas

Cerca de 700 participantes de 50 países diferentes se dieron cita en el campeonato mundial de Parma para competir en las ocho modalidades del certamen. En el caso de la pizza acrobática, la especialidad de Tolu, eran 22 los inscritos y, tras una prueba inicial, se clasificaron seis para la ronda final. Junto al pizzero de Alginet, un japonés que había ganado en dos ocasiones el título, un americano también campeón del mundo en una ocasión, un francés y dos italianos.

Francis Tolu tenía claro que era su último mundial y el espectáculo le sirvió como despedida. Hijo de padre italiano y madre valenciana, recuerda que fue su padre, promotor de la Pizzería Venezia que ahora regenta en Alginet, quien le apuntó un curso de acrobacia con las pizzas. «Me gustó y a partir de ahí se trata de desarrollar un estilo, practicar movimientos nuevos y tener mucha, mucha, imaginación», relata, mientras destaca que este año se apoyó en la poesía para preparar el espectáculo mientras que el año anterior lo había hecho en un monociclo, con el que también gano el mundial.

«Uno ya tiene una edad»

«Empecé en 1999 con las acrobacias y en el año 2000 gané mi primer mundial. Repetí el triunfo en 2003 y, después, por circunstancias, deje de ir a los campeonatos hasta que el año pasado regresé y conseguí también el título. Este año me he presentado con un espectáculo muy emotivo para despedirme porque uno tiene una edad (42), compites con gente muy joven y cada vez te cuesta más entrenar y preparar el espectáculo», señala.

Francis Tolu comenta que estos títulos dan proyección a su restaurante en el que, tras dejar la competición, seguirá ofreciendo espectáculos con música y fuegos lo sábado por la noche.