De vuelta

Nuevo ciclo, viejos fantasmas

OPINIÓN / Manolo Varó

Este año vamos a parecernos más a Italia que nunca, veremos cuantas veces votamos. Gandia se ha convertido en la «Aldea Gala» a ésta orilla del Mediterráneo.

En nuestra ciudad José Manuel Prieto ya tenía la percepción de repetir y resistir el tsunami azul y verde por una razón fundamental, los ciudadanos eran los primeros en avalar su magnífica gestión, su empatía y su honradez, irradiaban confianza y contaba con una lista mezcla de juventud y veteranía que tenía detrás un aparato de militantes y simpatizantes dirigido por Adrià Vila, cuya labor en estos últimos cuatro años ha sido fundamental en la victoria. Prieto ha demostrado que con las manos limpias, convicción y trabajo incansable se consiguen los objetivos:el centre Roís de Corella; el Bulevar de la Playa; el Palau de Justícia; la mejora del Centre Històric; el adecentamiento de los distritos; los aprobados Tinglaos del Puerto, la Remodelación del Institut Ausiàs March y, con la verdad por delante, la ciudadanía le ha otorgado 12 concejales, a uno de la mayoría absoluta, tras gestionar una pandemia mundial, una crisis económica con una guerra en marcha y una inflación desbocada que no ha mermado ni un ápice su credibilidad ciudadana.

El PP contaba con Juan Carlos Moragues, persona de prestigio profesional, que ha sumado un concejal más de 9 a 10, pero como en el resto de España, la desaparición de Ciudadanos le ha sumado el décimo concejal al PP. Su aterrizaje y planteamiento de objetivos se rompió desde dentro ¿No habrá influido el Torró Gate en desbaratar su proclama durante la campaña de que de 13 no bajaría? ¿Si Mazón le reclama dejará a sus 12.000 votantes en la estacada? Acusa de clientelismo a 14.339 gandienses que han votado al PSOE, es decir esas personas son tan burdas que le darán 40 años de mandato a alcaldes socialistas. Y cuando Rita Barberá gobernó 24 años como alcaldesa de València o dirigentes del PP fueron presidentes de la Generalitat durante 20 años, en total 44 años, ¿aquello qué era, clientelismo, servilismo caritativo o votos teledirigidos?

Compromís ha pasado de 4 a 2 pero claro ellos conservan su Tarrito de las Esencias intacto y lo importante no es ganar, sino participar juntos o divididos. De perdidos al río. Y la ultraderecha asienta sus posaderas con un representante por primera vez sumando una parte de los 1.800 votos que Ciudadanos obtuvo en 2019. por primera vez, es un mal augurio.

Y de repente Pedro Sánchez vilipendiado, insultado y desprestigiado, ha jugado la baza del todo o nada. Así que el 23 de julio a votar tocan. Las derechas ya se ven en la Moncloa. Pero resulta que si la izquierda se une de una vez, candidaturas conjuntas, y se dejan de regalos a los de en frente, podría repetir gobierno. Nunca hubo pandemia, crisis económica, 140.000 millones de euros en ayudas de la UE, subidas de pensiones, de salarios, gravar a bancos y empresas para ayudar a los más débiles por sus desmesurados beneficios, ayudas a los alquileres, becas a los estudiantes, financiación de la sanidad, la educación e ingreso mínimo vital… El lema de campaña de las derechas será: ¡Hermanos, avancemos por donde hemos venido! Es decir: retrocedamos.