El Consell promete abrir la plaza de la Salut pero aplaza el mapa sanitario de Gandia

El alcalde logra arrancar al secretario autonómico de Sanidad un compromiso que supone una satisfacción a medias

La paralización del importante proyecto lleva camino de convertirse el primer fiasco de la Generalitat tras el relevo político

A este complejo se van a trasladar algunos servicios que ahora están en el hospital, como el de Salud Mental

La plaza de la Salut, con el complejo sanitario al fondo, cerrado y con materiales de obra, ayer.

La plaza de la Salut, con el complejo sanitario al fondo, cerrado y con materiales de obra, ayer. / Levante-EMV

Sergi Sapena

Hace más de seis meses que la Generalitat Valenciana tendría que haber abierto el llamado Espacio Sociosanitario de Roís de Corella, situado sobre el solar donde durante décadas estuvo el hospital Francesc de Borja de Gandia. Ese complejo incluye una plaza, bautizada con el nombre de la Salut, que fue diseñada en gran parte con la aportación de propuestas ciudadanas para intentar que fuera un lugar cómodo.

Pero esta actuación, que ha supuesto la inversión de cerca de veinte millones de euros, lleva camino de convertirse en el primer fiasco que sufre Gandia por parte del nuevo Consell de la Generalitat tras las elecciones que auparon al PP y a Vox al frente de la Administración autonómica.

Porque pasado el tiempo han sido varias las ocasiones en las que el Gobierno local que preside el alcalde José Manuel Prieto se ha dirigido a la Conselleria de Sanidad para que solucionara el conflicto que mantiene con la empresa constructora y proceda a abrir la plaza, un magnífico espacio junto al paseo de les Germanies, y los locales construidos junto a la calle Benicanena. Al menos para trasladar allí, como estaba previsto, el departamento de Salud Pública del área de Gandia que ahora ocupa dependencias del ayuntamiento en la céntrica calle Duc Carles de Borja.

En las últimas semanas la insistencia del alcalde gandiense ha dado un resultado a medias. Según ha explicado a este periódico José Manuel Prieto, en una reunión mantenida recientemente con el secretario autonómico de Sanidad, Francisco Ponce, ha logrado arrancar el compromiso de abrir «en dos o tres semanas» el espacio de la plaza de la Salut, que ahora sigue cerrada en todo su perímetro mediante una valla metálica. En su interior, y a pesar de que algunos días se han visto operarios limpiando, todavía hay restos de material de obra que están por retirar. Ese plazo augura que la plaza podría ser disfrutada por los vecinos antes de las fiestas de Navidad y Año Nuevo.

El segundo aspecto, referido a la apertura de los locales para dependencias sociosanitarias, sigue en vía muerta. La Conselleria de Sanidad no aporta plazos para poner en servicio el espectacular complejo, que es, sin duda, el mayor que se ha construido en la Safor en las últimas décadas, exceptuando, obviamente, el hospital comarcal que abrió en 2015.

Los tres grandes bloques, con un diseño muy peculiar, están cerrados desde hace meses y los técnicos ya temen que la falta de mantenimiento pueda afectar a las instalaciones y obligue a una importante inversión para acondicionarlos. Baste decir que las terrazas de esos edificios están constituidas por zonas verdes, con tierra y vegetación, que requiere un cuidado permanente.

Muchas mejoras a la espera

Hasta este momento, y mientras la Conselleria de Sanidad no aclare cuál es su plan, no hay fecha para la puesta en marcha del centro sociosanitario Roís de Corella. Eso tiene una importante derivada en Gandia porque esta infraestructura se situó como el eje central de un nuevo mapa sanitario de la ciudad.

El Consell del Botànic que integraban el PSPV y Compromís ya había iniciado el proceso para la contratación de varias decenas de trabajadores, la mayoría con cualificación sanitaria, para activar estos edificios. Muchos vecinos de Gandia iban a asignarse a este centro de salud y así aliviar la presión que ahora sufren los de Beniopa y de Corea. Aunque inicialmente estaba previsto cerrar los consultorios ubicados en el antiguo centro social de Beniopa y el de Benipeixcar, el ayuntamiento ha pedido, por unanimidad, que ambos sigan abiertos.

Y, finalmente, el retraso del complejo sociosanitario deja sin fecha el traslado de algunos servicios que ahora se prestan en el hospital Francesc de Borja, entre ellos el área de Salud Mental y algunas otras consultas.