Apenas el 3,2% de las viviendas de Gandia se han construido en la última década

El mercado inmobiliario de la ciudad de Gandia sigue viviendo de las rentas. La capital de la comarca de la Safor fue uno de los puntos donde más se hizo patente la burbuja inmobiliaria, con la construcción de decenas de edificios. En 2008 llegó lo que ya se sabe, un estallido de la burbuja que paralizó de forma abrupta y prácticamente por completo aquella fiebre constructiva, hasta el punto de que, a día de hoy, doce años después, aún se sienten sus efectos.

Pese a que existe una evidente escasez de viviendas disponibles en la ciudad que está haciendo que el precio del alquiler y también de venta esté disparado, hace años que el ritmo de construcción de nuevos edificios es prácticamente nulo.

A día de hoy, de todos los inmuebles que se contabilizan en la capital de la comarca de la Safor, apenas un 3% se han construido en los últimos 15 años, y la gran mayoría de estos proyectos son casas unifamiliares, puesto que cuesta mucho encontrar un solo edificio que ahora mismo esté en construcción en la ciudad. Se trata de la cifra más baja desde la década de 1960, según los datos que recoge el Portal Estadístic de la Generalitat.

En concreto, desde el 2010 hasta el pasado 2022 se construyeron en Gandia un total de 2.911 inmuebles, lo que supone un 3,2% del total de los que existen.

Esta situación contrasta con la década anterior, la que va desde el 2000 hasta el 2009, un periodo en el que se construyó el mayor porcentaje de las viviendas en la historia. Fueron los años del «boom», cuando se contabilizaron un total de 21.349 construcciones, lo que supone un 23,7% del total. La cifra que más se le parece es la de la década de los 70, cuando se edificaron algo más de 21.600 viviendas, un 22% del total de las existentes.

Durante aquella década de vorágine, muchos edificios se quedaron sin acabar y también hubo un gran número de personas que perdieron sus viviendas por no poder hacer frente a la hipoteca. No en vano, el Instituto Nacional de Estadística (INE), en su último Censo de Población y Viviendas, calcula que la capital de comarcal acumula algo más de 5.000 viviendas vacías, como publicó este periódico hace unos meses. El caso es que muchas de ellas son propiedad de bancos y se encuentran cerradas y sin ocupantes, pese a lo cual resulta imposible a día de hoy encontrar un piso para alquilar.

Un dato. Durante el año 2023 se cerraron en la ciudad de Gandia un total de 1.864 operaciones de compraventas inmobiliarias, un ligerísimo incremento respecto año anterior (11). De todas ellas, un 96,2%, (1.795), es decir, la práctica totalidad, fueron con viviendas de segunda mano.

Precio de los materiales

El frenazo en la construcción tiene que ver, en parte, con el incremento de los precios de los materiales, lo que, como ayer publicaba este periódico, está frenando también que se levanten edificios de viviendas protegidas, lo que afecta de forma directa a las personas que cuentan con menos ingresos económicos.

La vivienda es un asunto que preocupa mucho en Gandia, donde cada vez resulta más complicado acceder a una. Es, de hecho, una de las ciudades con una situación más tensionada de España, resultado de contar con apenas opciones para alquilar y donde , lo poco que hay es cada vez es cada vez más caro y, por tanto, inaccesible, especialmente para los y las más jóvenes. El ayuntamiento está explorando fórmulas para atajar esta situación pero el mercado no lo pone nada fácil.