Dos testigos increparon a los acusados durante la violación grupal: "¡Dejadla! ¿No veis que no quiere?"

La Policía trata de localizarlos porque su testimonio es fundamental para apuntalar la versión de la víctima

La Policía Nacional busca al cuarto implicado, un menor de 17 años que está huido y al los otros tres identificaron tras ser detenidos

Imagen de archivo de la Ciudad de la Justicia de Valencia, donde se investiga la violación grupal.

Imagen de archivo de la Ciudad de la Justicia de Valencia, donde se investiga la violación grupal. / IGNACIO CABANES

Teresa Domínguez

Teresa Domínguez

Dos testigos a quienes aún no se ha podido tomar declaración porque no fueron identificados la noche en que se produjo la violación grupal a una chica de 18 años en un descampado de la Malva-rosa, de la que Levante-EMV viene informando en exclusiva desde que se produjo, llegaron a increpar a los presuntos agresores sexuales en pleno ataque. Su testimonio es importante, por lo que los especialistas del grupo de agresiones sexuales de la UFAM de la Policía Nacional sigue haciendo gestiones para dar con ellos.

Los hechos, como ha venido informando este periódico, ocurrieron entre las 5.00 y las 5.30 horas del sábado, 28 de octubre, en un descampado ubicado en el citado barrio valenciano frente a la fachada trasera del cuartel de la Guardia Civil de la Malva-rosa, desde una de cuyas cámaras de seguridad fue grabada toda la secuencia del ataque.

Según ha podido saber este diario de fuentes de toda solvencia, cuando se estaba produciendo la primera parte de la violación múltiple, en la parte trasera de la autocaravana –la segunda fase, ya dentro del Merceds Clase A blanco de uno de los detenidos y en la que supuestamente participaron solo el menor implicado que permanece huido y el detenido que ha quedado en libertad bajo fianza, el mismo que se ganó la confianza de la chica para llevarla a la encerrona –, aparecieron en escena dos jóvenes que nada tienen que ver con el grupo.

Les llamaron la atención

La cámara del cuartel de la Guardia Civil también captó ese momento. En la grabación se les ve acercarse e irse muy poco después. Como con el resto de lo ocurrido, las imágenes casan a la perfección con el relato de la chica. De hecho, ella declaró a los investigadores de la UFAM Policía Nacional que, cuando se estaba produciendo la agresión y ella les decía a sus atacantes que la dejaran, que se quería ir, mientras trataba de defenderse con los codos, la única parte del cuerpo que no le sujetaban, se percató de que se acercaban otros dos jóvenes y que increparon a sus agresores: «¡Dejadla! ¿No veis que no quiere?». Fue en ese momento cuando la chica se zafó de sus agresores y fue en busca de ayuda.

Nadie los identificó esa noche

Es cierto que estos dos testigos se fueron sin intervenir y sin pedir ayuda, pero la Policía continúa intentando identificarlos no por eso, sino porque su testimonio puede ser fundamental para la víctima. Según se ve en la cámara, ambos aparecen junto al guardia civil y al vigilante cuando estos acompañan a la víctima y a su amiga hasta el lugar donde fue violada, justo cuando los agresores salen a toda velocidad con el coche al ver aparecer al agente.

Luego, esos mismos dos testigos son grabados por otra cámara, esperando a la puerta del acuartelamiento. Sin embargo, ambos acabaron yéndose sin que nadie les pidiese su identificación, por lo que ahora la Policía Nacional está teniendo serias dificultades para saber quiénes son y citarlos como testigos.

En busca del cuarto inculpado: un menor de 17 años

Mientras tanto, los agentes encargados del caso continúan la intensa búsqueda de ese cuarto presunto implicado en la violación grupal, un menor de edad de 17 años a quien los otros tres han identificado plenamente como el amigo que fue con ellos de fiesta a Valencia -viven en un municipio del sur de la provincia de Valencia- en la noche del viernes 27 de octubre al sábado 28, cuando se produjo la violación múltiple.

Tal como adelantó este diario a principios de esta semana, ese cuarto sospechoso está plenamente identificado, pero de momento no ha sido detenido y continúa oculto. La Policía mantiene abierta una operación para dar con él, después de que su familia siga insistiendo en que no saben nada de él desde ese fin de semana.

De los otros tres arrestados, todos ellos de 23 años, uno está en prisión desde el pasado 4 de noviembre, otro en libertad bajo fianza de 5.000 euros y el tercero, en libertad provisional. . A los dos últimos, el juzgado de Instrucción 20 de València, en funciones de guardia, les impuso una orden de alejamiento de la víctima que les impide acercarse o comunicarse con ella por ningún medio. Los tres tienen antecedentes por delitos sexuales o por violencia doméstica, tal como ha publicado este diario.

Solo hay cuatro implicados

La grabación realizada por una de la cámara perimetral trasera, recoge, tal como ha venido detallando este periódico, no solo la secuencia completa de la agresión grupal a la chica, sino también la llegada y la partida de los únicos cuatro implicados en los hechos. De hecho, la Policía es contundente en ese aspecto: solo hay cuatro implicados en la violación múltiple, los tres ya arrestados y el menor a quien se está buscando. La víctima también es clara: recuerda -y da datos de por qué lo sabe- que fueron tres hombres distintos quienes la violaron.

La cámara (izquierda) del cuartel que grabó la secuencia completa ocurrida justo en el descampadao de enfrente.

La cámara del cuartel (izquierda) que grabó la secuencia completa de la violación múltiple ocurrida justo en el descampadao de enfrente. / Levante-EMV

Así, la cámara registró la llegada del Mercedes Clase A blanco de uno de ellos poco antes de la una y media de la madrugada. Tras estacionar junto a una autocaravana, en el descampado usado como parking y que se sitúa en el entronque de las calles Astilleros con Vicent Guillot Tío Bola, salen cuatro jóvenes de su interior y se dirigen hacia la discoteca por el tramo peatonal de esa segunda calle, que discurre por un lateral del cuartel.

La cámara ya no volvió a captarlos hasta cuatro minutos antes de las 5.00 horas, cuando los dos principales investigados –el menor que aún ni ha sido apresado y el que ha sido encarcelado– regresaron al lugar y se agazaparon en la parte trasera de una autocaravana aparcada junto al Mercedes.

Secuencia de una encerrona

Uno de ellos, el menor, llamó por teléfono y un minuto después apareció otro de los supuestos implicados, a quien la joven acompañó voluntaria y confiadamente sin saber el plan que se cernía sobre ella. La agresión sexual múltiple se prolongó por espacio de casi media hora, primero, en la parte trasera de ese vehículo vacacional y luego dentro del Mercedes.

En cuanto la chica pudo zafarse, justo cuando los dos testigos increparon a los agresores, pidió ayuda a un vigilante de la discoteca y a un guardia civil, que la acompañaron de regreso al descampado. Fue entonces, al verlos llegar, cuando los sospechosos, que la cámara también graba cuando se suben apresuradamente al vehículo, iniciaron una veloz huida del aparcamiento a bordo del Mercedes. Tres de ellos se entregaron seis días después, cuando el dueño del coche supo que la Policía ya lo tenía identificado.