Vuelve el festival Itinera, una propuesta cultural contra la despoblación

Más de cincuenta conciertos llegan este verano a los municipios más pequeños de la Comunitat de la mano del festival ITINERA

Alumnos participantes de la anterior edición.

Alumnos participantes de la anterior edición. / Levante-EMV

Mariano López

Hay ciertos axiomas que resultan inmutables. El cielo es azul, el agua moja, y el mundo cambia, en mayor o menor medida, gracias a la gente que se atreve a pensar diferente. Aquellos que creen que los sueños más fantásticos pueden convertirse en realidad. Y si no que se lo pregunten a Marcel Marata, cuando en plena pandemia, durante el confinamiento, tuvo una idea que escapaba de todas las ideas preconcebidas que nos puedan venir a la cabeza al escuchar la palabra «festival»: masificación, decenas de miles de asistentes, celebraciones musicales para un público esencialmente urbanita… Marcel, director de un nuevo y original festival de música y su equipo pensaron, precisamente, en darle la vuelta a la tortilla. Y el paso del tiempo les ha acabado dando la razón, dado que hablamos de un festival que a día de hoy se celebra en Catalunya, su lugar de nacimiento; Baleares, Castilla La Mancha y, por supuesto, la Comunitat Valenciana.

Durante su primera edición en nuestro territorio, celebrada en otoño de 2022, el festival Itinera tuvo lugar como experiencia piloto desarrollada a través de doce conciertos albergados por diez Pobles Xicotets de menos de dos mil habitantes de la Comunitat. Poblaciones como Geldo, en la comarca del Alto Palancia, L’Enova, en la Ribera Alta, o Senyera, en la comarca de la Ribera Alta pudieron maravillarse con las espectaculares actuaciones que tuvieron lugar a pocos metros de las casas de sus habitantes. Así se cumplían los objetivos fundacionales del festival. Por una parte, acercar la música a los Pobles Xicotets, consiguiendo así democratizar la cultura. Y además cumplir con la misión de vertebrar el territorio consiguiendo conectar localidades a menudo aisladas en multitud de sentidos. Conseguir que sus habitantes puedan dar a conocer la realidad de su entorno y a la vez disfrutar de la cultura, de forma descentralizada, en su propio hábitat natural. 

En territorio valenciano, los conciertos corrieron a cargo de las alumnas y alumnos de los Conservatorios Superiores de Música «Óscar Esplà», de Alicante, «Salvador Seguí» de Castellón y «Joaquín Rodrigo» de València. Como destaca Inmaculada Sánchez, Directora ISEACV, Instituto Superior de Enseñanzas Artísticas de la Comunitat Valenciana, que repite participación este año: «El festival brindó la oportunidad al alumnado de mostrar a un público real sus cualidades y capacidades como músicos. Les hizo perder el miedo escénico. La primera edición tuvo un impacto espectacular, tanto para el alumnado como para los habitantes de los Pobles Xicotets que no suelen gozar de este tipo de iniciativas». Como participantes en aquella primera edición, en el recuerdo quedan las espectaculares actuaciones del Sajára Brass Quintet, Parino and Cruces, Marcos Pinto y David Llácer, Pep Alacaraz y Albert Climent, el Gypsy Brass Quintet y el Trio Street Sax

 Para la edición 2023, los responsables de Itinera parecen haberse tomado al pie de la letra el dicho de que la segunda edición siempre supone la de la consolidación del proyecto. El festival tendrá lugar desde el 10 de junio hasta finales del mes de octubre de 2023, ampliando así significativamente su periodo de duración respecto al año pasado. Hay previstos más de cincuenta conciertos diseminados en otros tantos Pobles Xicotets de la Comunitat. Una serie de conciertos que reunirán sobre escenarios fuera de los circuitos habituales a jóvenes promesas junto a artistas consagrados dando prioridad siempre a los artistas locales. Figuras de la talla de Joan Chamorro, Big Mamma o talentos como el de Carla Motis, hermana de Andrea Motis, surgida precisamente de la factoría Chamorro. 

Concierto en L'Ènova 2022

Concierto en L'Ènova 2022 / Levante-EMV

Así, las jóvenes promesas valencianas que tendrán ocasión de entrar en contacto y establecer lazos con formaciones de otros lugares geográficos, posibilitando las sinergias entre ambos, y ofreciendo también de girar por esos otros lugares a menudo apartados de los circuitos por los que habitualmente se mueven. Entre las propuestas de las que podremos disfrutar este año, espectáculos que se mueven en un abanico de estilos tan variopintos como el Jazz, Blues, Soul, Gospel o la World Music.

Por lo que respecta a debajo del escenario, el festival ofrece una oportunidad para que los melómanos urbanitas nos desplacemos a disfrutar de la música en directo rodeados de bellísimos parajes naturales. Y como la guinda del pastel, la edición de este año incorpora la danza dentro de la programación del festival a través de las alumnas y alumnos del Conservatori Superior de Dansa de València. Una programación que proyecta ir ampliando su oferta cultural a otras disciplinas en sucesivas ediciones. Tal como apunta acertadamente Inmaculada Sánchez: «El festival puede contribuir a que los habitantes de esos Pobles Xicotets a menudo aislados se sientan miembros de la sociedad. Sin acceso a la cultura es imposible ser ciudadanos de pleno derecho».

«El festival –apunta Marata- también pone su granito de arena en la lucha contra la despoblación de los Pobles Xicotets, cuyos habitante, al aproximarse la cultura hasta al lado mismo de sus casas, contarán con un motivo menos para emigrar hasta las grandes urbes». En ese sentido cabe destacar la colaboración para la presente edición de instituciones como Avant, la Agenda Valenciana Antidespoblament, dependiente de Presidencia de la Generalitat. Esta Agenda acercará las propuestas de Itinera a los pueblos de la Ruta 99, esto es, las veinticuatro poblaciones de menos de cien habitantes de la Comunitat, además de otras localidades de la red AVANT a través de la FVMP, la Federación Valenciana de Municipios y Provincias.

En definitiva, Itinera ofrece la posibilidad de disfrutar de la música en directo en un ambiente familiar y con la tranquilidad de la que carecen los macrofestivales o el resto de festivales urbanos. Conciertos en maravillosos parajes donde además los asistentes podrán descubrir el patrimonio gastronómico, cultural, histórico o arquitectónico de cada una de las localidades por donde transite la caravana de del festival. Un festival con la filosofía de conectar mundos diferentes cuya idea nació precisamente cuando parecía que el mundo se iba a acabar.