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Los vecinos de la calle Manuel Colomer Marco volvieron a enfrentarse ayer con los trabajadores de la urbanización Sociópolis que están construyendo una estación de bombeo en la puerta de sus casas para elevar las aguas sucias de la macrourbanización al colector de la ciudad. La reanudación de los trabajos de instalación de unas grandes planchas metálicas produjo nuevas vibraciones y nuevos daños en las casas, lo que provocó la protesta y, tras una tensa negociación con los bomberos y la policía, la paralización de los trabajos.

Ya el pasado 10 de diciembre, los vecinos de cinco bloques afectados por esta obra avisaron a los bomberos de las grietas que se estaban abriendo en sus viviendas por las vibraciones de una gran máquina que estaba colocando unas planchas metálicas de 15 metros en el cubo de la futura estación de bombeo. Entonces los bomberos hicieron varias catas y pararon los trabajos.

Ayer, sin embargo, la máquina se puso de nuevo en marcha para, esta vez, sacar las planchas, y provocó nuevas grietas y alarma general, tanta que los vecinos avisaron a la policía y a los bomberos y, finalmente, se paró la obra. Tras una tensa discusión en plena calle, la decisión ha sido sacar las planchas utilizando una máquina más pequeña para que no se produzca vibración alguna en las viviendas cercanas.