El lago de la Ciudad de las Artes y las Ciencias se ha visto "invadido" por una colonia de algas que ha desbordado a los servicios de limpieza del complejo. El tratamiento con cloro y productos especializados no está siendo suficiente y ya hay grandes zonas del lago visiblemente afectadas. Las altas temperaturas de estos días y la escasa profundidad de las aguas están siendo, al parecer, sus principales aliados.

Según ha podido saber este periódico, la aparición de algas (una especie de musgo que crece en el lecho de hormigón y también sobre el "trencadís" de los laterales) es habitual todos los veranos, siempre en pequeñas cantidades. Pero este año la situación ha empeorado notablemente debido, sobre todo, a las altas temperaturas. Incluso las tormentas de verano contribuyen a ese desarrollo, pues se trata de agua no tratada que acaba convirtiéndose en "abono" para este tipo de plantas acuáticas.

A día de hoy el lago presenta numerosas manchas negras y el lateral que enfrenta con el Museo de las Ciencias Príncipe Felipe está completamente cubierto de este musgo. También los laterales de esta cuadrícula están gravemente afectados, no siendo así en el entorno de l'Hemisféric.

Para combatirlo, los servicios de limpieza están procediendo en un doble sentido. Primero ponen cloro directamente sobre las partes afectadas para matar las algas y posteriormente aplican líquido antialgas en todo el lago para evitar que vuelvan a crecer.

A la espera del invierno

Según fuentes conocedoras del caso, este trabajo se viene realizando desde hace tiempo y no está dando los resultados apetecidos, pues en plena campaña estival el problema no ha hecho sino crecer.

Ayer mismo unos operarios de la empresa concesionaria actuaban de esta forma y es previsible que lo sigan haciendo mientras se mantengan las altas temperaturas. Todo parece indicar, según las fuentes, que el principal enemigo de las algas es el frío y que su desaparición total no será posible hasta que entre el invierno.