Falta de viabilidad del modelo agrícola actual, envejecimiento de los agricultores, presión urbanística, fragmentación del territorio, contaminación de las aguas y deterioro del patrimonio cultural son algunos de los problemas que acechan a la huerta tradicional valenciana y que el Plan de Acción Territorial pretende solucionar. La vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, y la consellera de Vivienda Obras Públicas y Vertebración, María José Salvador, destacaron ayer durante la presentación del plan el esfuerzo realizado por establecer consensos y abrir a la vez nuevas posibilidades para garantizar la supervivencia de la huerta. «El único color que se ha mirado aquí es el verde», destacó Oltra.
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