Fiestas hará una última reunión con la policía antes de aprobar la "ley seca" fallera

La presión de las comisiones obliga a repensar la medida antes de su aprobación

Nuria Llopis critica que recortar a las 2 los horarios de las barras "deja a las comisiones sin una de sus mayores fuentes de ingresos"

Fuset asegura que enfrenta a los falleros y contribuye al incivismo

Plantá de una de los monumentos de las Fallas de Valencia

Plantá de una de los monumentos de las Fallas de Valencia / Paco Calabuig

H.G.

El Ayuntamiento de València aplaza a la semana que viene la aprobación del Bando fallero de 2024 ante la protesta enérgica de las comisiones falleras y la Asamblea de Presidentes por la limitación hasta las 2 de la madrugada a la venta de alcohol en las barras de las comisiones. Esta nueva medida incluida en el borrador del Bando Fallero que se conoció el miércoles se revisará en una nueva reunión de los responsables de la Concejalía de Fiestas con la Policía Local, que fue quien propuso esta restricciones a la venta de alcohol en las carpas más allá de las dos de la madrugada como medida para evitar el incivismo. Una medida que han criticado también los grupos de la oposición (PSPV y Compromís) que entienden que las limitaciones a la venta de alcohol castigan a las comisiones, porque las barras de venta de bebida son una de sus principales fuentes de ingresos y además fomentaría el botellón.

Las comisiones falleras consideran que la limitación hasta las 2 de la madrugada se debería ampliar al menos una más. Ante la falta de consenso el concejal de Fiestas, Santiago Ballester, ha decidido aplazar la aprobación del bando fallero de 2024 prevista inicialmente para esta semana, pero que tendrá que esperar a la próxima. "Queremos un bando fallero con el máximo consenso", informan fuentes municipales.

La concejala socialista Nuria Llopis advierte de que con la "ley seca" a las comisiones "van a ser los propios falleros y falleras, que van a pagar la factura de un problema que ni generan ellos ni se va a resolver por impedir a las comisiones que pongan una barra más allá de las dos de la mañana".

Por su parte, el concejal de Compromís Pere Fuset asegura que cerrar las barras falleras a las 2 y mantener las verbenas hasta las 4 "es incoherente pero, además, es peligroso". Con esta propuesta "se fomenta el incivismo, el conflicto en las fallas y, sobre todo, un botellón descontrolado por toda la ciudad", anuncia Fuset. "Pensamos que esta medida va en contra de la imagen de la fiesta, como también el hecho de avanzar la salida de las carpas al 5 de marzo o dar más tiempo a los mercaditos y a las buñolerías". Son medidas "absolutamente contrarias al espíritu que tiene que tener el Bando Fallero, que es buscar la conciliación y el encuentro en una fiesta que tiene que ser inclusiva para todos y todas".