Las Fallas de 2024 han inaugurado un nuevo ritual a pesar de que la fiesta se encuentre, en estos momentos, hibernada por el luto oficial y con el programa paralizado. Las tres jornadas de parón coinciden en el tiempo con la puesta en marcha de los puestos de venta ambulante de buñuelos, churros y artículos dulces en los puestos habilitados a tal efecto.

Es actividad comercial, no fiesta

No están sometidos a la suspensión general porque se trata de una actividad comercial y ésta está funcionando con normalidad, entre otras cosas, porque es un movimiento económico. 

El Bando de Fallas estableció que la venta podía empezar a partir del primer minuto del 24 de febrero y, efectivamente, los puestos han empezado a plantarse en las demarcaciones. No todos, pero los más madrugadores han querido aprovechar el fin de semana que, aunque ayuno de actos falleros, sí que tiene el flujo de visitantes y gente en la calle habitual. Por eso, los que no faltan, sobre todo, son los puestos del centro. 

Los puestos de venta ambulante están supeditados a la tutela de una comisión de falla que, de esta forma, obtiene unos ingresos económicos que, en las fallas céntricas o las mediáticas es una fuente de financiación muy importante mientras que en otras no pasa de irrelevante o menor. 

Obligaciones y prohibiciones

Entre las disposiciones que se exigen a estos establecimientos están el de no poder instalarse cerca de tiendas de productos especialmente inflamables (ropa) o electrónicos. Deben estar en condiciones higiénicas y sanitarias convenientes -so pena de ser sancionados por una inspección- y no pueden tener más reclamo que el adorno de los mismos. Está prohibida la megafonía. Alrededor de estos puestos hay toda una iconografía publicitaria, como son los paquetes de cacao, botellas de leche con etiquetado de hostelería, senyeras, petardos de imitación, etcétera. 

En la ordenanza municipal se especifica que los puestos de venta deben tener a la vista el precio de los artículos.

Primeras restricciones de aparcamiento

Con motivo de la entrada en vigor del Bando de Fallas, también se han empezado a establecer restricciones en el aparcamiento de coches en el centro a pesar de que no haya eventos festivos. Así, desde este sábado ya está prohibido aparcar en Ayuntamiento, Xàtiva, Lauria, Correos, Pérez Pujol, Sorolla, Barcelonina, Ballesteros, Barcas y San Vicente (desde plaza de España hacia adentro). 

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